“Alarmantes y preocupantes”: así se refirió el el ministro de Desarrollo Social de la provincia, Danilo Capitani, a los índices de pobreza e indigencia difundidos este jueves por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Y admitió además que los números coinciden con el importante aumento registrado en la demanda de módulos alimentarios. El Indec publicó los datos de pobreza correspondientes al primer semestre de 2021. La cifra que sorprendió a todos fue la correspondiente al Gran Santa Fe, que se ubicó en el 50,5%, superando por 10 puntos al promedio nacional (40,6%) y marcando un incremento del 10,7% en solo seis meses: en el segundo semestre de 2020, la pobreza afectaba al 39,8% de la población de este aglomerado urbano.

El funcionario apuntó que entre enero y julio la Provincia invirtió 2.500 millones de pesos en los diferentes programas de asistencia alimentaria que administra y que prevén otro tanto para la segunda mitad del año, lo que totaliza 5.000 millones de pesos (frente a los 3.117 millones de pesos destinados en 2020). Entre las iniciativas que incrementaron sus montos, Capitani destacó el aumento del saldo mensual de la Tarjeta Única de Ciudadanía. El ministro explicó que en las ciudades de Santa Fe, Rosario, Rafaela, Reconquista, Venado Tuerto y sus zonas de influencia, la entrega de los módulos de alimentos está a cargo de la Provincia de forma directa. Para el resto de las localidades se firman convenios con los gobiernos municipales o comunales, a los que se les transfiere los fondos necesarios para la adquisición y distribución de la asistencia alimentaria. “En el Gran Santa Fe tenemos un programa especial que es el operativo Puerta a Puerta, que hacemos junto con las organizaciones sociales y las iglesias y que entrega más de 3.500 módulos por día”, precisó Capitani.

Consultado por la notable diferencia entre la situación del Gran Rosario (donde la pobreza aumentó sólo 1,1% en el último semestre) y el Gran Santa Fe, el funcionario analizó que “en el Gran Rosario hay mayor cantidad de pequeñas y medianas empresas que están mucho más diseminadas en la región que en el Gran Santa Fe. Por eso, en el Gran Rosario la recuperación pospandemia generó mayores posibilidades de trabajo, que es lo que realmente impacta en los índices y hace que el porcentaje de pobreza sea menor”, explicó. “Para revertir los niveles de pobreza es fundamental generar trabajo. Por eso, además de disponer la asistencia alimentaria –que va a continuar durante mucho tiempo– también abordamos la cuestión de la capacitación en oficios, y estamos apuntando a dos rubros fundamentales: la construcción y la metalmecánica, porque son los que más rápidamente pueden generar fuentes de trabajo y crecimiento de la economía”, indicó el ministro. Finalmente, Capitani anticipó que el Instituto Provincial de Estadísticas y Censos (Ipec) publicará en las próximas semanas números muy similares a los informados por el Indec: “Los datos son muy parecidos porque también se mide el ingreso de los hogares. La inflación ha hecho que muchos trabajadores estén por debajo de la línea de pobreza y no puedan acceder a la canasta básica”, concluyó.

Fuente: Aire de Santa Fe