El juez penal de tribunales, Nicolás Falkenberg, ordenó la apertura del juicio oral y público para juzgar al imputado que tiene la causa que investigó el femicidio de Liliana Sala (57), la jefa de compras del Correo Argentino de Santa Fe que en 2021 fue brutalmente asesinada en su casa de Sauce Viejo. Por el caso se encuentra en el banquillo de los acusados Pablo Flatt, el joven de 20 años, que llegará al debate detenido y acusado de haber entrado a la casa de Sala -cuando esta dormía- golpearla, abusarla y luego asesinarla y robarle su camioneta. Tales hechos fueron calificados por la fiscal del caso, Alejandra Del Río Ayala, como un homicidio, doblemente calificado, por ser cometido por un hombre contra una mujer mediando un contexto de violencia de género (femicidio) y por ser perpetrado con alevosía.

En la resolución que dispuso la apertura del juicio, el juez Falkenberg, admitió un total de 59 testigos convocados por la Fiscalía; dos por la defensa, a cargo del defensor público Sebastián Amadeo; y uno por la querella representada por los abogados Carlos Rabazzi y Rubén Kilibarda que asisten a los familiares de la víctima: Nicolás Rubén, David Emanuel Gatti y Mariana Carolina Cejas. Si bien la resolución prevé que declaren mayormente peritos e investigadores que abordaron el caso, también pasarán por la sala de audiencias del futuro juicio algunos testigos civiles. Entre ellos, quienes supieron ver al imputado a bordo de la camioneta que robó de la casa de Sala tras el femicidio. Además, fueron citados a declarar el padre de Flatt y sus hermanos, ya que tenían contacto con Liliana Sala.

También fueron admitidos una serie de documentos como cartas de incidencia de la central del 911, registros de cámaras municipales y privadas durante las horas posteriores al crimen de la mujer. Inclusive, fueron incorporados al juicio los elementos con que Flatt, según la Fiscalía, utilizó para matar a Sala: un secador de pelo marca Philips; y una barreta de hierro de 58 centímetros, secuestrada desde el piso trasero izquierdo de la camioneta Jeep Renegade de la víctima. En tanto, existe un estudio en el cual los peritos detectaron restos biológicos de Flatt en el cadáver de la víctima. Tales elementos fueron secuestrados en el marco de la investigación que encabezó la Brigada de Femicidios (de la Agencia de Trata de Personas) que mediante una serie de evidencias llegó a Flatt como el principal y único responsable del femicidio de Sala, ocurrido el 20 de diciembre del 2021.

Según la investigación, aquel día, en horas de la madrugada, Flatt (que para ese entonces tenía 18 años) ingresó a la casa de la víctima ubicada en avenida de las Banderas y Magnolias de Sauce Viejo. Una vez adentro se dirigió hacia el dormitorio de Sala, a la cual apuñaló, golpeó hasta abusarla sexualmente y luego mató mediante un mecanismo de asfixia. Tras cometer el femicidio, envolvió el cuerpo con ropa de cama que se encontraba en la habitación, cerró la puerta de la pieza con llave y sustrajo la camioneta Jeep Renegade blanca que era de la víctima. A bordo del vehículo, circuló a gran velocidad por Sauce Viejo, fue hasta su casa de la zona del barrio Las Vegas de Santo Tomé y hasta chocó con un automovilista en la zona de Circunvalación norte, en donde después abandonó el coche. Flatt fue luego detenido días después e imputado formalmente y el 3 de enero del 2022 el juez penal José Luis García Troiano dispuso su encarcelamiento preventivo, por lo que esperará el juicio tras las rejas.

Fuente: Aire de Santa Fe