El cuadro de salud de las dos mujeres que fueron atacadas por un perro pitbull el domingo en Santo Tomé presenta realidades distintas. Según el último parte médico brindado por el director del Hospital José María Cullen, doctor Bruno Moroni, una de las víctimas continúa en terapia intensiva, en estado crítico, con asistencia respiratoria mecánica y pronóstico reservado. La otra se encuentra internada en sala general, estable y bajo tratamiento con antibióticos y analgésicos.

La víctima en estado más grave sufrió severas lesiones en el brazo derecho y en las piernas. La magnitud de las heridas obligó a los cirujanos a realizar una compleja intervención vascular: se le practicó un bypass por la falta de pulso en el brazo y se reconstruyó parte de la zona afectada con injertos de piel. “El objetivo es evitar la amputación, pero hay que ver cómo evoluciona el tejido en las próximas 24 horas”, advirtió Moroni.

La segunda mujer, aunque también fue intervenida quirúrgicamente, presenta un estado general más alentador. Recibió múltiples mordeduras en el rostro y el brazo, y los médicos debieron reconstruir parte del labio inferior. Las heridas, según el parte médico, son graves, pero su evolución es favorable.

Cómo fue el ataque del perro pitbull

Ambas víctimas fueron atacadas dentro de la casa donde convivían con el animal y su dueño, un joven de 27 años que quedó detenido tras el hecho. El perro, de raza pitbull y de unos 50 kilos, fue abatido por la policía cuando los efectivos del GOE ingresaron al domicilio y encontraron al animal aún en actitud de ataque. El caso conmocionó a la comunidad santotomesina por el contexto familiar en el que ocurrió. “No se trató de un perro que se escapó ni de un ataque en la vía pública. Era un animal que convivía con estas personas”, remarcó Moroni, quien también subrayó la brutalidad de las mordeduras: “Las pacientes presentan pérdida de sustancia significativa. Tuvimos que tomar tejido de otras zonas del cuerpo para reconstruir”.

El estado de salud de la mujer internada en terapia intensiva será reevaluado en las próximas horas. Los médicos consideran clave la evolución del colgajo injertado y la respuesta del cuerpo al procedimiento vascular. La posibilidad de perder el brazo aún está latente. La causa penal está en manos del Ministerio Público de la Acusación, mientras la familia y el entorno del detenido aún no hicieron declaraciones públicas. El pitbull, que tenía siete años, fue sacrificado por la policía en el lugar del ataque

Fuente: Aire de Santa Fe