En Colón todavía hay coletazos de lo que dejó la derrota del viernes pasado como local ante Aldosivi 2-0 en el último partido del año en Santa Fe. Más que nada por la forma en que se dio: carente de ideas y hasta pareciendo estar por compromiso y no con compromiso. Un juego de palabras con una clara diferencia que se acentuó tras la desvinculación del entrenador Pablo Lavallén.

En principio la idea era que estuviera el jueves en el pendiente de la 13ª fecha ante Arsenal, pero esta pálida y deslucida actuación aceleró los trámites y se despidió del plantel en los vestuarios. Esto deparará que Pablo Bovaneri, conducto de la reserva, tome las riendas de manera interina mientras la dirigencia ya le busca reemplazante.

Obviamente se esperan importantes cambios, pero tampoco medio equipo, ya que los tres puntos que habrá en juego son trascendentales para engrosar un promedio que se cae a pique. Se desinfló a punto tal de quedar al borde de la zona roja, por lo que ya el margen de error es nulo.

Por si fuera poco, el equipo lleva más de 18 meses sin ganar fuera de casa, por lo que sería una buena oportunidad para echar por tierra con semejante malaria, que magnifica todavía más la opaca campaña. Es complicado saber quiénes pueden jugar, más que nada porque fue una actuación colectiva muy floja. Es muy probable que el interino ensaye algunas apuestas, como la aparición de Braian Galván de entrada.

Lo que sí está claro es que no podrá estar Federico Lértora, que fue amonestado en el inicio del segundo tiempo y deberá purgar una fecha de suspensión por llegar a la quinta. Desde el cotejo ante River venía colgado y, por el rol que cumple dentro del campo de juego, indefectiblemente se iba a dar tarde o temprano.

Después, por ahora es un misterio. Por si fuera poco, el elenco de Sarandí viene de ganarle este sábado en el Tomás Adolfo Ducó a Huracán y positivismo no le falta. Entonces la vara de exigencia es aún mayor para Bonaveri y compañía, que tampoco pueden hacer demasiado en algunos días.

Será cuestión de apelar al orden, lo anímico y el pragmatismo para por lo menos sumar y espantar los aires de pesimismo que rodea a este Colón deshilachado en el final de este 2019.

Fuente: UNO Santa Fe