Colón es las dos caras de la moneda: de local se volvió un equipo sólido y que suma, pero cada vez que va de visitante la pasa mal. En este caso, volvió a defeccionar y justo en el Clásico. Quizás tener la cabeza en la final de la Copa Sudamericana lo sacó un poco de foco, pero la realidad es que careció de las ideas necesarias para intentar por lo menos alcanzar el empate.

De esta manera, extendió su malaria fuera de casa a 17 partidos. La última vez fue el 14 de mayo de 2018 ante Racing 3-1, que a la postre le dio la clasificación a la actual edición del certamen de la Conmebol. ¡Son 16 meses en una marca alarmante! y que claramente le impide prosperar o por lo menos intentar pelear más arriba.

Estos números son en el torneo de Primera División, porque a nivel internacional superó a Deportivo Municipal y Argentinos Juniors. Por eso existe todavía una disyuntiva en lo que el equipo puede ofrecer en los torneos de eliminación directa y los que son por los puntos.

El refrán indican que las rachas están para cortarse, pero por ahora eso no puede ser posible cuando le toca salir del estadio Brigadier López. En este campeonato perdió todos los partidos en esa condición, por lo que tampoco logra sumar una igualdad que, por lo menos, le pondría coto a la sequía.

Ahora se viene un parate por fecha FIFA, donde el entrenador Pablo Lavallén tratará de devolverle al plantel tranquilidad tras este revés y tratar de enfocarse en el duelo como local ante Godoy Cruz, pero también en la intención de ver cómo hacer para ganar otra vez como visitante.

Fuente: UNO Santa Fe