Un grupo de vecinos de la ciudad de Santo Tomé reclama al Municipio la ejecución de obras de pavimento de hormigón de calles de varios barrios, que habían sido acordadas. De acuerdo a lo expresado por los vecinos, “sólo se ejecutó la mitad de las obras prometidas”, dijo el vecino Manuel Martínez, de barrio Favaloro.

El Plan de Pavimentación es ejecutado por personal del Municipio, bajo la modalidad de contribución por mejoras, y contempla la construcción de calzadas de hormigón simple, con un espesor de 15 centímetros, además de obras complementarias de saneamiento hídrico en las arterias intervenidas.

El acuerdo alcanzado en 2016 entre los vecinos y el Municipio contempla la ejecución de 80 cuadras de pavimento de hormigón armado. El compromiso fue asumido por los 1.209 frentistas de distintos barrios que acordaron realizar la contribución por mejoras. El plazo era de 5 años y fue extendido al agregarse más calles.

Para la realización de la obra se subdividió la ciudad por sectores. Según lo manifestado por los vecinos, todavía falta realizar la obra en tres de estos sectores de los barrios Gral Paz, Loyola y Favaloro.

El primero abarca una parte del barrio Gral. Paz y Loyola. Allí son 8 cuadras pendientes. El segundo, en otra parte de Loyola, y son 12 las cuadras pendientes. Y el último es el barrio Favaloro, a donde falta realizar el pavimento en 13 cuadras.

“Le reclamamos la falta de cumplimiento al Municipio”, dijo Martínez, en diálogo con El Litoral. La preocupación es que “la intendenta (Daniela Qüesta) dejará el gobierno en diciembre y quedará pendiente hacer la mitad de la obra”, advirtió luego. También le enviaron una carta a la presidenta del Concejo Municipal, Natalia Angulo.

“Hace dos años juntamos firmas entre los vecinos porque la obra había sido paralizada. Queríamos que se actualicen los costos para poder ejecutarla”, dijo Martínez. “La intendenta dijo que toda la ciudad está subsidiando a la obra de pavimento. Nosotros no queremos eso, porque esta obra se paga por contribución de mejoras, la pagamos los frentistas”, recalcó. “Queremos que se actualicen los costos para que se pueda financiar la obra pendiente”, finalizó. Por este último motivo le enviaron el reclamo al Concejo.

La respuesta

La intendenta Qüesta explicó -en diálogo con El Litoral- que las demoras obedecen a tres factores: la emergencia hídrica acaecida durante los primeros años de su gestión, el aislamiento social por la pandemia de coronavirus y, por último, los problema que ocasiona la falta de hormigón en el mercado, producto de la escalada inflacionaria nacional y los consecuentes problemas financieros del país.

Por otra parte, la intendenta admitió que todavía restan concretar 33 de las 80 cuadras contempladas por el programa municipal de pavimentación de calles. “Es que el Concejo agregó más cuadras y los tiempos se prolongaron”, dijo Qüesta. Y agregó que más allá de esto, “está en marcha el frente de obras del Grupo 7, y se están ejecutando 6 cuadras”.

Respecto de la preocupación planteada por los vecinos, que mencionaron que la actual gestión municipal abandonará el poder en diciembre y la obra no estará finalizada, Qüesta contestó: “Así como nosotros heredamos el plan y lo llevamos a cabo durante nuestra gestión, está previsto que se continúe durante el año próximo, en la gestión entrante; porque se trata de un plan exitoso, realizado con mano de obra del Municipio, que trasciende las gestiones”.

Fuente: El Litoral