Luego de un fin de semana con un calor extremo, este martes llegó un pequeño alivio a la ciudad de Santo Tomé y la zona. Durante la mañana, la localidad padeció un diluvio inesperado que terminó ocasionando algunos problemas en el tránsito.

De acuerdo a los datos brindados por el Centro de Información Meteorológica de la FICH -UNL pasado el mediodía habían caído unos 53 mm en la capital de la provincia. Pero el alivio duraría poco.

En las primeras horas de la tarde, el sol volvió a brillar y el cielo se mostró despejado sin ningún rastro de la intensa tormenta que sufrió la ciudad en horas del mediodía. El martes terminaría con una temperatura de 29.8°, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).

Para mañana miércoles se espera una temperatura mínima de 20° y una máxima de 38° con un cielo parcialmente nublado. Mientras que el jueves regresarían las intensas lluvias junto a una mínima de 23° y una máxima de 34°.

Fuente: El Litoral