Este verano no será uno más. La pandemia por Covid-19 generó un mando de incertidumbre para los que se imaginaban vacacionar fuera de la ciudad, y en Santa Fe, todavía se espera un largo mes de octubre para conocer día a día como se irá presentando la curva de contagios de coronavirus. En este contexto, y a esta altura del año, ya comenzaron a “explotar” los teléfonos de las inmobiliarias en busca de opciones locales para pasar el caluroso verano santafesino que se aproxima, y las alternativas más buscadas en la actualidad, son las quintas con pileta, ya sea en Colastiné, Rincón, Arroyo Leyes, Santa Rosa de Calchines o Sauce Viejo. Todo se convirtió en una opción apetecible para el santafesino acostumbrado a veranear fuera de la ciudad y que este 2020/2021 no podrá hacerlo, o a esta altura de las circunstancias, no se anima por el entorno de desasosiego.

Hay otra realidad; hasta el día de hoy, es mucho más la demanda que la oferta para alquilar quintas. “Todos los días estamos recorriendo la ruta 1 para tratar de convencer a propietarios de alquilar sus propiedades”, indicaron a UNO Santa Fe desde una reconocida inmobiliaria de la costa. ¿Porque tan poca oferta? Un dato: hoy los propietarios prefieren alquilar sus viviendas de forma particular, esquivando a las inmobiliarias para poder negociar su propio precio. Pero a su vez, y entendiendo lo narrado anteriormente, muchos santafesinos que alquilaban sus casas-quintas los meses de verano, lo hacían porque salían a vacacionar a otras latitudes; y hoy esa opción es mirada con mucho recelo, atentos a la evolución de la pandemia.

Hablemos de precios; según el sondeo realizado por UNO Santa Fe, ya las consultas son muchas y diarias a las inmobiliarias, sobretodo teniendo en cuenta que recién comienza el mes de octubre, y en relación a todos los años anteriores, la gente comenzaba a preguntar y asesorarse en el mes de noviembre. Los valores y presupuestos varían según las comodidades de la propiedad y sobretodo de la ubicación. Una quinta en la zona de Arroyo Leyes, kilómetro 12 de la ruta 1, para 6 personas, con tres piezas, parque, aire, televisión y pileta, para los meses de enero y febrero, se consigue desde los 5.500 pesos por día; a eso hay que sumarle el consumo eléctrico. Si hablamos de un grupo familiar de 10 personas, ya el precio se ubica en el orden de los 7.500 por día.

Desde Colastiné, pasando por Villa California y llegando a Rincón, el abanico de ofertas es mayor, y los precios oscilan entre los $6.000 y $10.000 por día, siempre sumando el consumo eléctrico, que otros años estaba incluido dentro del paquete, como el mantenimiento del jardín y de la pileta. Hoy, algunas inmobiliarias manejan un presupuesto de $12.000 por mes para que el agua luzca cristalina. Sauce Viejo, por su parte, siempre fue más económico a la hora de alquilar quintas, con pisos de alquiler por día que parten desde los $4.000 más el consumo eléctrico. No obstante, según indicaron fuentes inmobiliarias consultadas por UNO Santa Fe, la localidad ubicada a la vera de la ruta nacional 11, todavía, teniendo en cuenta el mes del año, “no ofrece una referencia de precios clara, pero siempre fue un 35% más barata a la hora de alquilar”.

A la hora de alquilar una quinta, ya sea para fin de semana, quincena o mes, todas las inmobiliarias exigen a la hora del contrato, un depósito de garantía de $15.000 aproximadamente, contra $6.000 aproximadamente por el mismo concepto en el alquiler cara a cara con el propietario. Finalmente, y entendiendo el contexto de pandemia, los santafesinos aceleraron y se adelantaron en el proceso de consultas de quintas pensando en pasar en verano en la región. Esta catarata de llamados que recibieron inmobiliarias y particulares, hizo que por estos días se especule mucho con lo que podrían ser los precios finales, sin una referencia fija para el mercado de cara a la temporada estival, siempre teniendo en cuenta que este verano, la ciudad y la región, de la mano de las altas temperaturas, va a contar con la presencia inusual de mucha gente que no saldrá a vacacionar.

Fuente: UNO Santa Fe