Norma Marquelo, que fuera colaboradora del edil Carlos Hugo Tepp (fallecido en 2015), remitió al Concejo santotomesino una copia del proyecto de ordenanza que establece la creación del Tribunal de Cuentas de la Municipalidad de Santo Tomé. En su momento, esta propuesta quedó en carpeta como parte de la tarea realizada por el extinto edil -referente indiscutido del radicalismo santotomesino- y su equipo de trabajo.  Según lo expresado por Marquelo, la iniciativa reviste “real importancia” y amerita su evaluación legislativa, porque a través de ella se dispondría de una herramienta legal para el contralor de la administración de las finanzas públicas, la que permitiría contar con facultades para intervenir en casos de incumplimiento de disposiciones legales vigentes. “Esta es una deuda que tenía con él, con quien trabajé tres años”, manifestó Norma en clara referencia a Tepp, al que la gente cariñosamente llamaba “Alemán”. Con ellos, como parte del bloque Identidad Radical también trabajaron Andrea Bertolino, Germán D’Amico y Exequiel Gioria.

De las problemáticas desarrolladas junto a Tepp, dijo Marquelo, ésta era una de las más trascendentes, ya que con la creación del Tribunal de Cuentas se podría contribuir a garantizar la transparencia de una gestión municipal, sin depender de órganos auditores externos o privados (ya que este nuevo estamento funcionaría como un adecuado y eficiente control de los actos de gobierno). El Concejo Municipal tiene atribuciones para ejercer el control de actos administrativos o asuntos públicos del gobierno municipal, pero con ciertas limitaciones. En la práctica, dicha facultad se ejerce mediante los pedidos de informes y el articulado de la Ley Orgánica de Municipalidad de la Provincia. Dicho contralor, en definitiva, pasaría a tener una instancia superadora.

Debate abierto

El Litoral consultó sobre el tema al presidente del cuerpo legislativo, Martín Giménez, quien destacó que todo mecanismo que genere mayor participación y transparencia en el control de una gestión siempre va a ser bienvenido. A su vez, recordó que el FPCyS lo viene demostrando desde 2007 en adelante, con la elaboración de distintas normativas orientadas a la búsqueda de claridad en los actos de gobierno, mencionando como ejemplos la ordenanza de Libre Acceso a la Información Pública y la publicación de la nómina completa de empleados en la página de Internet, o en la imputación de las partidas (para saber, entre otras cosas, en qué se gasta y en qué no se gasta).  Pero, al margen de la importancia que pueda tener un tribunal de cuentas como el descripto, Giménez aclaró que también habría que analizar la viabilidad de una estructura a nivel municipal con esas características.

“Creo que la discusión debe exceder a cada uno de los ediles de la ciudad e incorporar a todas las fuerzas políticas, así como a juristas reconocidos, ya no tendría sentido generar estructuras que después no tengan competencias, porque no se cumpliría el objetivo de la clarificación del control”, añadió el titular del Concejo Municipal, sin dejar de recordar que la iniciativa en cuestión por ahora está en estudio de las comisiones internas.  El concejal aclaró que la figura de los tribunales de cuentas ya se ha aplicado en otras localidades y que su constitución en Santo Tomé seguramente merecería una rediscusión en términos locales. “Se habló en el recinto sobre el tema y la propuesta está, en términos legislativos, en un tratamiento de discusión; en lo personal, considero que la discusión nos excede, porque tendrían que incorporarse otros organismos, así como distintas opiniones de la sociedad civil, especialistas y juristas, para hacer algo acorde a las necesidades de la ciudad y los tiempos que corren”, redondeó.

Querido y respetado

Carlos Tepp fue concejal de Santo Tomé en tres ocasiones: 1985-1989, 2005-2009 y 2011-2015, período que quedó inconcluso por su fallecimiento. A su vez, al segundo de esos mandatos lo interrumpió en 2007 para cumplir funciones como secretario municipal de Gobierno y Acción Social, con Fabián Palo Oliver al frente de la Intendencia y en el marco de la gestión inicial del FPCyS. Ocupó dicho cargo entre el 7 de diciembre de 2007 y el 10 de noviembre de 2010, cuando renunció al mismo. A fines de 2014 se supo que estaba enfermo y que su condición de salud era irreversible. Falleció el 11 de febrero de 2015. En marzo de ese año fue reemplazado en el recinto por Eduardo Miguel Cosentino, quien actualmente cumple funciones en la Dirección Municipal de Relaciones Institucionales. Fue una persona querida y popular, muy respetada por los santotomesinos (“era todo un señor”, recuerda Norma Marquelo), quienes lo conocieron en distintas facetas y actividades: comerciante, presentador de fiestas, legislador, funcionario. Como dirigente político, a la hora de hablarse de candidaturas locales, por lo general era quien cosechaba mayor adhesión de parte de los vecinos. Su relación con El Litoral, fluida, cordial y sincera, iba más allá de sus funciones o intereses. “Radicheta” de toda la vida, sobre su pertenencia al centenario partido alguna vez expresó: “Tener muy en claro los principios radicales y mantener durante cuarenta años el escudo partidario en mi corazón, no tienen precio”.

 ¿Cómo sería?

El proyecto de ordenanza del Tribunal Municipal de Cuentas contiene un anexo, en el cual se explican la conformación, funcionamiento, competencias y organización del mismo, así como facultades, recursos y responsabilidades. Allí, se establece que lo constituirían tres miembros, todos designados a propuesta del Poder Ejecutivo local y con acuerdo del Concejo. Uno de ellos sería elegido presidente y los otros dos vocales. La duración en el cargo se extendería por cuatro años, pudiendo ser reelegidos. La presidencia se ejercería anualmente y en forma rotativa.

Fuente: El Litoral.