Si bien es cierto que hubo varias bajas eel pasado 30 de junio, para el DT Juan Azconzábal era preciso una refundación en Unión y por eso aspira a que lleguen por lo menos 10 jugadores. Hasta el momento hay confirmadas siete incorporaciones y habría algunas más al caer. Pero la realidad es que el grupo excedería la cantidad de jugadores y por eso Vasco ya comenzó a charlar con los que no considerará. Precisamente dos de ellos vienen de jugar en la Primera Nacional para Alvarado: los volantes Walter Bracamonte y Lucas Algozino. Unión es dueño de sus pases y como el Tiburón no podía retenerlos, retornaron a Santa Fe con la meta de pelear un puesto y convencer al técnico. Sabían que la tenían complicada, pero así y todo aguardaban la ilusión de formar parte del proceso.

Sin embargo, Juan Azconzábal les habría comunicado que tendrían pocas chances de jugar. El argumento que lo grafica es que por la izquierda están Gabriel Carabajal y Marco Borgnino, donde se desempeña Walter Bracamonte; mientras que por la derecha está Pablo Palacio, eventualmente Javier Cabrera y porque la meta es traer un refuerzo en ese lugar. Esto quita de plano a Lucas Algozino. Ambos tienen contrato y por eso está la disyuntiva de buscar nuevos horizontes o quedarse hasta diciembre y esperar por mejores propuestas, con el nacimiento de una nueva temporada. Que se dilate la vuelta del fútbol por la pandemia del coronavirus complica la decisión de los jugadores, que analizan qué es lo mejor.

Formados en las inferiores del Tate, Bracamonte y Algozino tuvieron una destacada participación en el ascenso con Alvarado. Fueron casi siempre titulares y esto se pensó que podía ser importante al momento de regresar a Santa Fe. Pero está claro que Juan Azconzábal no los conocía y a esta altura no lo convencieron. Esto no quiere decir que se les privará entrenar, ya que son patrimonio de la institución, por lo que quedará en ellos ver qué quieren hacer; si quedarse o ver opciones para buscar continuidad.

Fuente: UNO Santa Fe