Emanuel González, el hijastro del empresario rosarino Luis Paz, que actualmente se encuentra detenido y a la espera de ser juzgado por una megacausa que lo sindicó como el cabecilla de organización narco que traficaba drogas desde Bolivia y Paraguay las trasladaba hacia Santa Fe, deberá nuevamente rendirle cuentas a la Justicia federal tras haberse fijado fecha para una nueva indagatoria en su contra. Es que juez federal Francisco Miño determinó que existen elementos para mantener un estado de sospecha sobre los bienes que el comerciante, con residencia en Santo Tomé y Rosario, adquirió desde el 2012 hasta por lo menos el 4 de abril del 2018, fecha en la que fue detenido por la Gendarmería Nacional por orden del mismo magistrado.

La idea de atacar los cimientos económicos de González surgió luego de una investigación que profundizó el fiscal federal santafesino, Walter Rodríguez, que tras cotejar una serie de reportes de la Administración Federal de Ingresos Públicos, analizar redes sociales y vincular números, determinó que el rosarino infringió la ley no solo con la venta y distribución de drogas sino también con el lavado de activos con fondos provenientes del narcotráfico. El llamado a indagatoria alcanza además al entorno familiar de Gónzalez ya que el juez citó a la pareja del comerciante, la cual fue identificada como Melani E. y la madre de esta, Marta Teresa P. A su vez, también fueron llamadas a indagatoria la madre de González, y su abuela: Beatriz María del Luján G., (madre del imputado), Inés G. (abuela). Todas acusadas de haber actuado como “testaferras o prestanombres” de los bienes que detectó la Justicia.

El juez por último también citó al narcotraficante de Paraná, Elbio Gonzalo Gastón Caudana, el cual fue condenado en 2018 a 12 años de prisión efectiva por organización del comercio de estupefacientes tras un fallo dictado en el Tribunal Oral Criminal de la ciudad de Paraná. Las indagatorias fueron fijadas para el 3 y 4 de marzo próximo en el Juzgado Federal N° 2 de Santa Fe situado en calle 9 de Julio al 1693. Para el primer día fueron citados González, su madre y abuela, mientras que para el segundo deberán presentarse su pareja, suegra y el propio Caudana que deberá ser trasladado por personal de la Policía Federal Argentina hasta el estrado santafesino. Los bienes que investigó la Justicia del patrimonio de González son en total doce automóviles, algunos de alta gama, que fueron adquiridos entre el 23 de junio del 2013 y el 4 de abril del 2018. Como así también la adquisición de una casa situada en el barrio Jorge Newbery de la comuna de Sauce Viejo. Finalmente, la lupa estuvo puesta en una embarcación que supo haber sido ofrecida por Mercado Libre el comerciante.

Punto por punto

La inconsistencia de la situación patrimonial de González fue alertada por fiscal Rodríguez que mediante el análisis de informes que realizó la Afip detectó que el rosarino tuvo un crecimiento patrimonial “sostenido en el tiempo sin justificación lícita”, pudiendo inferirse en la puesta en circulación de bienes provenientes del tráfico de estupefacientes, con la consecuencia posible de que el origen de los mismos adquiera apariencia de licitud. Los investigadores del caso llevaron a cabo una radiografía del patrimonio de González y detectaron que revistió la calidad de Monotributista -Categoría A- durante el periodo comprendido entre el 21 de marzo del 2006 y el 30 de noviembre del 2006 fecha en la que se dio de baja por cese de actividades. Afip detectó que el rosarino tuvo un crecimiento patrimonial “sostenido en el tiempo sin justificación lícita”, pudiendo inferirse en la puesta en circulación de bienes provenientes del tráfico de estupefacientes.

En octubre del 2011 y hasta abril del 2014 estuvo inscripto en el organismo recaudador bajo la actividad de “venta al por mayor de abonos, fertilizantes y plaguicidas”. En tanto, en mayo del 2014 se inscribió en la actividad de “Servicios de Asesoramiento, dirección y gestión empresarial realizados por integrantes de cuerpos de dirección en sociedades excepto las anónimas”. Sin embargo, según la Afip, no registró información de sociedades que administre. En tanto, durante el 2015 pasó a ser empleado de la Distinción SRL que compartía con el exagente policial Edgardo Baigoría y que se encargaba del servicio de gruas. En su dictamen de solicitud de indagatoria, el fiscal Rodríguez sostuvo que “abundan las inconsistencias” entre los datos declarados y “no se vislumbran elementos que permitan confirmar la efectiva realización” de actividades comerciales.

Vehículo, casa y una lancha

Los autos que investigó la Justicia y que según el criterio de la Fiscalía fueron adquiridos por González y muchos de ellos puestos a nombre de su madre, abuela, novia y suegra son en total doce: un Volskwagen Bora color champagne 2013; un Mercedes Benz, modelo C-200 Kompresor 2006; Volskwagen, Vento color azul 2011; Toyota Corolla color gris 2010; Ford Ecoesport tipo rural color negro 2012; Audi modelo 3.2 Quattro -imagen de portada- ; Renault modelo Symbol 2010; Peugeot Partner Presence AA 1.4.2017; Volkswagen, modelo Gol Power, color gris 2011; Chevrolet modelo Sonic 1.6; y un Volkswagen Vento 2011.

La pesquisa hizo foco además en una lancha que González habría adquirido el 13 de abril del 2017 y que mediante la red social Facebook ostentó en varias fotografías. Se trata de una lancha cuya matrícula es “Rey054122” y que según develó la investigación fue puesta en venta a través de www.mercadolibre.com a un valor de $280.000.

Finalmente, la lupa se encuentra puesta en la adquisición de una casa quinta ubicada en Estrella Federal y Glicinas del barrio Jorge Newbery de la zona norte de Sauce Viejo. Esa propiedad, fue adquirida el 30 de abril del 2014 y tiene dos lotes lindantes, con una superficie total de 520 y 817,7 metros cuadrados. En esa misma propiedad, es donde parte de la flota de autos investigados fueron vistos en reiteradas oportunidades por los investigadores.

Por esa casa, terminó ligado a la investigación el paranaense Elbio Caudana ya que pactó la compra de la propiedad con González por un monto de $1.600.000. Así lo indicó un documento que fue secuestrado de una escribanía de calle 1° de Mayo al 2100 en 2018 y que había pautado que la operación inmobiliaria iba a ser abonada en distintos tramos: no solo con dinero sino también con bienes.

Fuente: Aire de Santa Fe