El escenario de casos positivos no es el mejor para el Gran Santa Fe ya que supera la peor de las previsiones realizadas por el grupo de científicos locales pertenecientes al Conicet, quienes realizan proyecciones y pronósticos de posibles nuevos infectados. La curva de contagios no cede en la capital santafesina, a diferencia de lo que ocurrió en Rosario. Los investigadores esperaban que el Gran Santa Fe iba a estar por debajo de los 30 mil contagios para el 5 de enero; algo que –a este ritmo de contagios– probablemente pueda ocurrir antes. El nivel actual de contagios ya supera al estimado para el cierre de año. “Estoy preocupado porque los datos reales están superando la peor de las previsiones que habíamos hecho”, señaló el doctor en Ciencias Matemáticas e Investigador Superior del Conicet, Hugo Aimar. Advirtió que era algo “esperable, pero después de las festividades”, no ahora.

Destacó que la curva de contagios en “Rosario bajó pero no en el departamento La Capital. Nosotros no pudimos, sigue subiendo; si bien la tasa es un poco menos que hace un tiempo pero sigue subiendo, escalando”. Aimar aclaró que las proyecciones realizadas están basadas en lo ocurrido a principios de diciembre. Es decir, restará conocer el impacto que tendrá en el Gran Santa Fe los encuentros sociales por las fiestas y cierto relajamiento que pudo haber en los cuidados. Esta situación podrían acarrear consecuencias (léase crecimiento de casos) a partir de la segunda semana de enero.

“Lo que estamos viendo, que es malo para Santa Fe, son consecuencias de actitudes previas al 10 de diciembre. Entonces, tenemos que esperar que hacia el 10 de enero veamos los efectos de las fiestas”, graficó. Apuntó que lo más preocupante no es solamente el número total, sino “la transversalidad durante las fiestas”. En esa línea, explicó: “Nos juntamos todas las edades, es lo lindo de las fiestas, pero puede implicar mayores peligros (en personas mayores)”. En declaraciones al programa “De10” que se emite por “LT10”, consideró que el “barbijo dejó de ser un hábito”. En esa línea, insistió que en términos epidemiológicos la situación no es buena en los principales centros urbanos del país.

“Se están analizando decisiones a nivel nacional sobre qué hacer”, apuntó Aimar en clara alusión a la reunión que mantuvo el presidente Fernández con Rodríguez Larreta y Kicillof por el crecimiento de contagios en Amba. “Lo que tal vez sea la segunda ola en la Argentina quizás esté llegando en un momento beneficioso, porque es verano, pero poco esperado”, afirmó. Ante este escenario, los científicos que participan del estudio de proyecciones de contagios en el departamento La Capital apelan “a la actitud responsable y racional de la comunidad santafesina en estos días de celebración, que representan una variable nueva cuyo impacto en el desarrollo del futuro de la propagación de la pandemia es impredecible: higiene, aire libre, distanciamiento, reuniones de grupos pequeños (mucho más pequeños que los autorizados), evitar compartir vasos, platos, cubiertos, servilletas. Apelamos también a la recuperación de la costumbre del uso de barbijos en todas las situaciones de contacto social”.

Fuente: UNO Santa Fe