Alrededor de 80 bolsas de abrigo, 75 toallas y 300 juguetes fueron entregadas al grupo de Mamás Sustitutas del Hospital Iturraspe de manos de los alumnos de los quintos años del Colegio Inmaculada de Santo Tomé. Las donaciones se recolectaron con apoyo de toda la comunidad educativa en el marco de una campaña solidaria impulsada a inicios del año escolar.

Se trató de una propuesta que surgió de los mismos chicos y chicas como continuidad de otros proyectos solidarios que encabezaron el año pasado, también en forma mancomunada con toda la comunidad educativa y a través de un abordaje interdisciplinario que contó con el acompañamiento de los docentes de todas las áreas.

Asimismo, la propuesta logró conmover a grupos ajenos a la entidad educativa, como comerciantes o amigos de los chicos que sumaron también sus aportes y que ya se están preparando para la continuidad de la propuesta que está pensada para el Día de la Madre y Navidad.

“La idea de la campaña, que se pensó con el mismo lema de las Madres Sustitutas: ‘cambiar dolor por amor’, es lograr una cobertura anual, por eso los chicos idearon las etapas”, explicó en diálogo con Aire Digital el vicedirector de la entidad, Osmar Vassi.

En ese sentido, el hombre contó que todo lo recaudado fue consensuado con el grupo de Mamás Sustitutas del Hospital Iturraspe, teniendo en cuenta las necesidades que tienen al dedicarse a atender exclusivamente a los pacientes pediátricos y sus familiares, en su mayoría del interior de la provincia.

Asimismo, Osmar Vassi rescató que la entrega se realizó un día antes de que los grupos emprendieran el tradicional viaje a Bariloche. “Ellos eligieron hacer esta particular ‘previa’ con mucha alegría y responsabilidad. Realmente es muy destacable el compromiso que asumieron como grupo y lo que esta acción generó en ellos”, dijo.

Para todos

El trabajo solidario del grupo de Mamás Sustitutas del Hospital Iturraspe está centrado en la atención integral de quienes esporádicamente están pasando por una enfermedad propia o de un familiar, quienes muchas veces llegan de urgencia al hospital con lo puesto y deben quedarse por muchos días.

“Muchas de las familias que llegan aquí son del interior de la provincia y con condiciones de vulnerabilidad”, comenzó a relatar Andrea Barnes, una de las coordinadoras de la agrupación, quien destacó que en tanto se busca siempre ayudarlos a todos con insumos básicos como kits de higiene personal, toallones y abrigo o indumentaria si es necesario.

En esa línea, Barnes hizo hincapié en que además su acción está ligada al acompañamiento de los niños, niñas y adolescentes pacientes. Y en ese sentido afirmó que suelen repartirles juegos de mesa, colores, libros para colorear o juguetes aptos para usar en una cama.

Al respecto, la mujer rescató la acción de los estudiantes del Colegio Inmaculada de querer ayudarlas en su trabajo y aseguró estar muy emocionada al ver “a jóvenes que están terminando una etapa de sus vidas interpelados por ayudar al que lo necesita”.

“Se lo dijimos a las autoridades de la institución, este acto demuestra que van por buen rumbo”, remarcó y en esa línea aprovechó a invitar a los interesados a sumarse a su labor a contactarlas a través de un mensaje privado en la página de facebook.

“Hoy somos 20 las voluntarias que conformamos el grupo que cumple funciones en turnos de mañana y tarde, de acuerdo a la disponibilidad de cada una en dos horas semanales”, contó Andrea Barnes y concluyó: “No hay condiciones para ser parte, solo se requiere tener amor y disponibilidad de tiempo para dar”.

Fuente: Aire de Santa Fe