Además del candente clima interno que profundizó la grieta en Unión, otro de los temas de actualidad que atraviesa a la institución rojiblanca está ligada a lo deportivo, específicamente con la continuidad o no de Gustavo Munúa y de Santiago Mele.

Luis Spahn, presidente tatengue, comentó en AIRE en qué situación se encuentran ambas negociaciones. Respecto a Mele, por quien Unión tiene hasta el 31 de diciembre para ejecutar la compra del 70% de su pase por 750.000 dólares, el dirigente dijo: “Tenemos dos meses para resolverlo y vamos a buscar distintos mecanismos. A pesar de que el Estado sacó una normativa restringiendo el giro de divisas. Los clubes que giraron mucho en 2020 podrán girar dólares, los que compramos poco en 2020 al exterior nos castigan diciendo que estamos inhibidos”, explicó.

La continuidad de Munúa

Dejando en claro que tienen la intención de quedarse con el arquero, sobre Gustavo Munúa sí fue menos preciso y dijo: “Estamos trabajando, hay un montón de cosas para ver si es factible. Está analizando si es de su interés seguir y nosotros también estamos analizando. No están cerradas las puertas para una continuidad, pero tampoco están encaminadas para que la haya”, dijo en Ahora Vengo.

Cambio de marca de indumentaria

Con el fin de año no llegan a su fin vínculos contractuales con jugadores y cuerpo técnico, sino con la marca de indumentaria que viste al club. En AIRE, Luis Spahn reveló que finalizó el contrato con la empresa italiana que proveía de ropa a Unión y que ya está cerrado cuál será su reemplazante. “Tenemos todo acordado con KDY porque, lamentablemente, Kappa también sufre los problemas cambiarios y no puede importar las telas que necesita desde Brasil. No iba a poder cumplir con el acuerdo de entrega de indumentaria y tuvimos que cambiar.”, comentó el presidente de Unión.

“El socio de Unión paga la cuota social como un kilo de pulpa”

El presidente rojiblanco habló en AIRE sobre estos reiterados pedidos desde la tribuna y explicó por qué no es tan sencillo generar ingresos: “Le encuentro una fácil solución, llevamos la cuota a $6.000. El socio de Unión paga una cuota social como un kilo de pulpa, paga una quinta parte de lo que cuesta ver a ‘Pimpinela’, que son dos. Nosotros tenemos que poner a 25 jugadores más cuerpo técnico, médico, es fácil pedir. Pero entendemos también que esto es una pasión, es cultural”,. Los ingresos por cuota social se transforman así en la principal vía de ingresos que tienen los clubes. Pero esto va de la mano con una cuestión cultural que acompañe o incentive a los hinchas a gastar dinero en el club.

Al respecto, Spahn explicó: “Tenemos que hacer que pase un poco como en Estados Unidos, que van contentos a la cancha a ver béisbol, fútbol americano, compran la cerveza, se compran el gorro. Nosotros estamos en una pequeña curva que va a esa tendencia. Como cuando nos tocó viajar a Uruguay, a Colombia, a Brasil, la gente se quedó tres, cinco días, no se quedan para el partido nomás”, abundó el dirigente de Unión. “El fútbol es una herramienta de socialización, de turismo y nosotros tenemos que entender que no podemos poner una cuota a $6.000 y decir que ‘somos competitivos'”, agregó

Fuente: Aire Santa Fe