El juez penal de tribunales, José Luis García Troiano, dictó la prisión preventiva este jueves para Mariano Alberto Caridad, el joven de 21 años que fue detenido por el ataque a balazos a Gastón Copes, el pasado domingo en la avenida 7 de Marzo de la ciudad de Santo Tomé. La resolución judicial fue luego de una audiencia en donde el acusado aceptó la medida cautelar por medio de su abogado particular, Raúl Sartori. Por el caso, Caridad fue imputado por el fiscal de la causa, Estanislao Giavedoni, que le atribuyó “tentativa de homicidio agravada por ser cometida con un arma de fuego”, tras haber sido detenido el domingo, en horas del mediodía, en barrio Las Vegas.
Además de la detención, la policía secuestró un Chevrolet Cruze gris que, según estableció la investigación, era en el que circulaban Caridad y el otro implicado que tiene el caso el cual se entregó el miércoles por la tarde junto con su abogado particular, Esteban Yossen. El mismo, de hecho, será imputado en las próximas horas en tribunales. Sobre la mecánica del hecho, los investigadores determinaron que el ataque ocurrió a las 6 de la mañana del domingo y tuvo lugar en la esquina de avenida 7 de Marzo y su intersección con la Luján. Tal afirmación surgió luego del peritaje de cámaras de seguridad –tanto públicas como privadas– que captaron la secuencia criminal.
En este sentido, se determinó que Copes fue atacado por dos hombres que iban a bordo de un Chevrolet Cruze gris y que esperaron que la víctima descienda de un Volskwagen Passat en el que circulaba. Con los mismos, habría tenido un altercado unas horas antes en el boliche Teos, en la ciudad de Esperanza. Cuando Copes bajó del auto para orinar, fue sorprendido por los agresores que con distintas armas de fuego lo acribillaron a balazos hasta dejarlo tirado en la vereda en medio de un hilo de sangre y por lo menos ocho vainas servidas.
Ambos pistoleros huyeron del lugar a bordo del Cruze el cual abandonaron en la esquina de Luciano Torrent y Seguí, en zona del barrio Las Vegas, sin sus respectivas patentes. La situación causó sospechas en los vecinos del lugar por lo que horas después llamaron a la central del 911. Al lugar llegaron policías de la jurisdicción que cotejaron el vehículo y seguidamente detuvieron a Caridad que, al ver la presencia policial, fue hasta allí para reclamar por el vehículo.
Fuente: Aire de Santa Fe