La campaña de vacunación antigripal en Santa Fe ya lleva más de tres meses y como viene sucediendo con otras inmunizaciones, la población pediátrica que debe recibir una dosis entre los 6 y los 24 meses es la que menor cobertura alcanzó hasta el momento. Mientras que a los mayores de 65 años ya casi se los vacunó a todos, los chicos apenas si alcanzan una cobertura del 40 por ciento, tal cual lo confirmó la ministra de Salud de la provincia, Sonia Martorano. El dato no es menor si se tiene en cuenta que la vacunación en chicos de esa edad es obligatoria y que se espera un nuevo pico de contagios de enfermedades respiratorias para julio y agosto.

La funcionaria admitió “un cansancio” tras la pandemia de Covid 19 que requirió la aplicación de varias dosis de vacunas, pero recalcó la “importancia de completar los calendarios obligatorios, sobre todo en la población más chica”.

La provincia inició la campaña 2023 de vacunación antigripal con el personal de salud sobre la última semana marzo y ya en la segunda semana de abril las primeras 88 mil dosis que habían llegado a Santa Fe comenzaron a colocarse también en el resto de la población, estimando alcanzar a unas 850 mil personas.

La ministra señaló que desde entonces “las vacuna llegaron y están en los hospitales, centros de salud y farmacias” y no se produjeron faltantes. Así y todo, la aplicación y los niveles de cobertura “están muy bien”, con una única excepción: la población pediátrica, que aún no supera el 40 por ciento de cobertura.

La vacuna es obligatoria para los mayores de 65 años, niños de entre 6 y 24 meses, además de embarazadas en cualquier momento de la gestación, puérperas y personas de cualquier edad con factores de riesgo o patologías previas, ya sea cardíacas, pulmonares o inmunodeprimidos.

Baja adherencia

“El mayor problema, como en otras vacunas, lo estamos teniendo en la población pediátrica”, admitió la ministra de Salud, que incluso indicó que se están llevando adelante acciones específicas en espacios públicos para captar la atención de los adultos a cargo de los niños y así lograr la vacunación.

“Esta es la población donde más pedimos que se vacunen”, recalcó Martorano y agregó: “Estamos yendo con equipos los fines de semana a la Calle Recreativa, donde la gente está más tranquila y allí avanzamos, pero hay que insistir”.

La funcionaria, como se viene señalando a nivel nacional en el último tiempo, indicó que no se trata de una cuestión que suceda específicamente con la vacuna contra la gripe, sino también con otras dosis del calendario obligatorio.

“En el caso de la Menveo (contra la meningitis) que son tres dosis, vemos que en la aplicación del tercer mes tenemos una cobertura del 92 por ciento, en la del quinto mes alcanzamos el 85 por ciento y ya en la de los 15 meses, apenas estamos en el 55 por ciento”, detalló y señaló que en estos casos también se realizaron “campañas específicas”.

“El alivio a veces viene en el ingreso escolar, a los 5 años, donde tienen que regularizar las aplicaciones, pero lo que insistimos es que deben mantenerse los controles pediátricos por lo menos hasta los 2 años, porque hay vacunas importantes que deben ser aplicadas”, subrayó y consideró que el bajo nivel de vacunación se debe “a un cansancio generalizado que se vio en la pospandemia, tras las reiteradas aplicaciones de vacunas de Covid”.

Los mayores, los más inmunizados

La contracara son los mayores de 65 años. Si bien en el caso del personal de salud ya se alcanzó una cobertura del 71 por ciento, que es el promedio de todos los años, y entre los grupos de riesgo la proporción de vacunados es el del 65 por ciento, los adultos ya alcanzan una cobertura cercana al 100 por ciento.

“Los mayores saben de su vulnerabilidad y van a vacunarse”, dijo la ministra, aunque no dejó de lado el empujón que significan los operativos en hospitales y hogares geriátricos, donde como en tiempos de pandemia directamente se va a vacunar a los adultos.

“Esa es una movida importante que empezó con la pandemia, pero que sostenemos tanto en Rosario y Santa Fe como en el norte de la provincia, aunque cueste mucho esfuerzo, pero da resultados”, dijo Martorano en referencia a la logística que se puso en marcha en tiempos de Covid con los móviles del Ministerio de Salud y que se decidió sostener en el tiempo.

Si bien por ahora, superado el pico de mayo, los hospitales están “a un 78 por ciento de ocupación y con nivel de camas disponibles”, anticipó que se espera un nuevo pico de enfermedades respiratorias para julio y agosto.

“Hay circulación de virus para los cuales no hay vacunas, como el adenovirus y el sincitial respiratorio, pero tenemos vacuna para la gripe y tenemos dosis, así que insistimos en la aplicación”, concluyó la funcionaria. Las dosis están disponibles en todos los centros de salud y hospitales de la ciudad, ya sean municipales o provinciales, de lunes a viernes, de 8 a 13.

Fuente: La Capital