Juan Carlos Portillo se convirtió en una de las grandes apariciones de Unión en la última temporada. Llegó de la mano de Martín Zuccarelli y en pocos meses se ganó un lugar en el equipo titular, convirtiéndose en un estandarte de la defensa, donde incluso le ganó el puesto al capitán Claudio Corvalán. En sus vacaciones en Misiones, Juan Carlos Portillo habló con El Deportivo de Primera Edición, donde se refirió al gran momento que está viviendo en Unión, aunque también contó cómo fue su camino hasta llegar a consolidarse en un equipo de Primera División. “Esto es algo muy lindo, como estar viviendo una película. A veces pienso y recuerdo que a muchos de los jugadores que hoy me toca marcar, hace algunos meses los miraba por la tele”, relató Juan Carlos Portillo en el arranque de la entrevista. En cuanto a sus inicios en el fútbol, Juan Carlos Portillo reveló: Todo fue por mi viejo, Leonardo, que es el más futbolero de la familia. Desde chico me motivaba, me acompañaba, jugábamos a los pases. Yo soy del barrio San Alberto de Puerto Rico y a los siete años él me llevo a una escuelita de fútbol, la 9 de Julio, que ahí empecé a jugar ya de manera más competitiva”.

En tanto que sobre su llegada a Crucero del Norte, Juan Carlos Portillo que terminó siendo clave en Unión, indicó: “Llegué en 2015. En ese momento, estaba jugando en el Club 25 de Mayo, acá de Puerto Rico, y un conocido me llevó a Crucero. No era una fecha de pruebas, era un día común de entrenamientos de las inferiores de AFA. Yo tenía 15 años y la verdad es que fue un paso muy lindo. Crucero estaba en Primera, así que nos tocó jugar contra Colón, Lanús, Estudiantes y otros clubes grandes”. Luego, cuando se le preguntó por su desembarco en Unión, Juan Carlos Portillo afirmó: “Fue gracias a Totti Klusener, mi compañero en Crucero. Su representante me vio en uno de los partidos, Totti le habló bien de mí y él termino también representándome a mí. Y en octubre de 2020 conseguí esa prueba en Unión… Fui en remis a Santa Fe, pasa que era una fecha complicada por la pandemia y no había transporte público. Me llamaron de Unión y que tenía que estar allá en tres días. Averigüé colectivos y no había nada. Y justo en ese tiempo estaba Iván Molinas, otro compañero de Crucero, que se estaba por ir a Alvarado de Mar del Plata, así que me comuniqué con ellos y fuimos a medias con el remís…”.

“Salimos de Posadas un domingo a las 14. Yo me tenía que presentar lunes o martes. Y el viaje salió una fortuna, si no me equivoco, creo que pusimos entre 16 y 17 mil pesos cada uno. Es que, en ese momento, para transitar por el país los únicos permitidos eran los remiseros”, contó Juan Carlos Portillo sobre la odisea que tuvo que atravesar hasta llegar a Santa Fe. Y Juan Carlos Portillo destacó: “Llegué un lunes de madrugada. El domingo de noche íbamos en el remís y le pregunté al remisero para qué hora calculaba que íbamos a llegar a Santa Fe. «A eso de las 2», me dijo. Entonces le avisé a la gente del club. Pero en medio del viaje, sin decirnos nada, el remisero paró en una estación de servicio y se puso a dormir. Y ahí estuvimos una hora. Nosotros con Iván no pudimos dormir, hinchábamos un poco y después terminamos cabeceando, pero no dormimos nada”.

En cuanto a su estreno en la Primera División de Unión, Portillo indicó: “Llegué y estuve entrenando dos semanas con la Reserva. Ahí ya había gente del plantel de Primera que bajaba a ver las prácticas. Y un día vinieron y me pidieron que me haga el hisopado para presentarme a entrenar con la Primera. Ahí me llevaron al predio de Casasol y quedé con el plantel profesional. Mi debut fue contra Racing en Avellaneda. Fue uno de los días más felices de mi vida. Trataba de mantenerme tranquilo, porque entré en el segundo tiempo y estábamos perdiendo 1-0, así que sentía la necesidad de hacer las cosas bien, de entrar enfocado. No sé si decir que fue el sueño del pibe porque no había hinchas, pero fue una sensación muy linda, difícil de describir con palabras”.

“Es algo muy lindo. Es como estar viviendo una película. A veces pienso y recuerdo que a muchos de los jugadores que hoy me toca marcar, hace algunos meses los miraba por la tele. Contra Lanús entré en el segundo tiempo, me toca entrar y marcar al Laucha Acosta, que se va para la esquina. Ahí era él y yo, mano a mano. Llegué y le puse con la rodilla, la verdad que era para expulsión. Después del partido me decía entre risas «vos no tenías que estar jugando más». Y después también contra Huracán, que despejo la pelota, viene Chávez, me choca y me tira al piso…. Ahí nos empezamos a decir de todo… Después me miraba y se cagaba de risa”, reveló Juan Carlos Portillo en otra parte de la charla.

También se le preguntó por la diferencia entre jugar en Primera División y el Federal A, y manifestó: “Creo que la principal diferencia que se marca es la posesión. En Primera se le da mucho valor a la pelota. Y se la mueve más rápido. Es más dinámico. Y al ser más precisos los pases, no es tan cortado, tan pausado. Y también se hace mucho hincapié en lo táctico. En Primera se juega más táctico, es más organizado, y se le da mucha importancia a eso. Eso te obliga a prepararte mejor cada semana, porque te enfrentás a rivales de jerarquía”. Por último, se le preguntó por los desafíos que se le vienen a Unión, y Juan Carlos Portillo indicó: “Las expectativas son siempre las mejores. Yo trato de mejorar en lo personal, de seguir creciendo, con fe y confianza, y con el apoyo del cuerpo técnico. Trato de estar mejor cada día y de dejar una buena imagen en cada partido, para así llevar a Unión a lo más alto. Trato de ponerme metas a corto plazo y cumplirlas de la mejor manera, porque sé que así se van a ir dando los resultados y las oportunidades para seguir creciendo”.

Fuente: UNO Santa Fe