La estadía de Nicolás Blandi en Santa Fe y con la camiseta de Unión está lejos de ser la esperada. El delantero hace más de tres meses que se sumó al plantel rojiblanco y apenas sumó 42 minutos en cancha. En consecuencia, no llegó a completar un primer tiempo. Su primer entrenamiento fue el domingo 8 de agosto y desde un primer momento se sabía que debía realizar un trabajo de reacondicionamiento físico, producto de una larga inactividad. Pero esa adaptación sufrió un contratiempo, ya que se resintió de una lesión anterior.

Eso hizo que se demorara su debut y recién pudo hacerlo el 26 de septiembre en la victoria del Tate como local ante Patronato por 2-0. El entrenador era Diego Mosset y el delantero ingresó a los 31′ del segundo tiempo. Su segundo partido fue el 8 de octubre en la derrota frente a Platense por 2-1, ingresando a los 39′ de la etapa complementaria. Volvió a sumar minutos el 25 de octubre en la caída ante Independiente por 1-0, ese día entró a los 34′ del segundo tiempo y el último partido que jugó fue el 8 de noviembre en la derrota contra Newell’s por 1-0 y también pisó el campo de juego a los 34′ de la etapa complementaria.

Así las cosas, en los cuatro partidos disputados sumó tan solo 42′, lo que habla a las claras que no está en su plenitud ni física ni futbolística. Y encima en las últimas horas se confirmó que sufrió una molestia muscular en uno de los últimos entrenamientos. Por ese motivo, sería sometido a un estudio para tener un mejor diagnóstico. Fue el propio entrenador rojiblanco Gustavo Munúa, quien este martes en una nota periodística reconoció la molestia sufrida por el delantero. “Blandi sufrió una recaída, tiene una molestia y estamos evaluando. No sabemos si es de una semana, dos o veinte días. Ojalá que no se estire mucho”.

Fuente: UNO Santa Fe