La idea comenzó el 8 de diciembre cuando armaron el arbolito. Ivana, una de las policías que ese día estaba de guardia, forró una caja para juntar juguetes y comenzó la cruzada para los chicos del comedor de la Escuela Ignacio Crespo. Los efectivos pertenecientes a la seccional novena emprendieron la cruzada solidaria y rápidamente contagiaron a la zona de las buenas intenciones. Todos colaboraron en algo: haciendo el aguante en la guardia, llevando cosas de sus hijos que ya no utilizaban, armando paquetes, envolviendo regalos. Otros dispusieron de su tiempo para trasladar cosas. Este miércoles, entregaron los juguetes a los niños que concurren al comedor de la  Escuela Nº 166 Ignacio Crespo de Santo Tomé. Para muchos integrantes de la dependencia policial fue un año difícil, con pérdidas familiares. También por tener que soportar cuestiones complicadas dentro del ámbito laboral. Sin embargo, primó la fortaleza grupal, la camaradería y la solidaridad.

Fuente: Aire de Santa Fe