Colón es noticia. Sin el Pulga Rodríguez, venció por 3-1 a Platense en Vicente López y sigue como cómodo líder del grupo A de la Copa de la LIga Profesional. Y presenta números bárbaros con Eduardo Domínguez al frente del equipo.
Jugadas siete fechas, el Sabalero suma 19 puntos sobre 21 posibles (seis victorias y un empate). Además, marcó 15 goles, con un promedio de 2,14 por partido. Por si fuera poco, le marcaron apenas dos goles en lo que va de la Copa (Platense este sábado y Aldosivi, fechas atrás). Tomando las dos tablas (grupo A y B), es el mejor equipo en todos los mencionados rubros.
Como DT de Colón, donde tuvo un paso anterior entre 2017 y 2018, Domínguez suma 39 partidos, 20 triunfos, 11 derrotas y ocho empates. ¿Efectividad? 58.11 por ciento. Por si fuera poco, tiene a Pulga Rodríguez como uno de los goleadores del certamen, con cinco gritos.
Las estadísticas de Colón son casi perfectas. No solo manda con pulso firme en su zona, sino que la mayoría de los números de Colón son mejores que los del resto de los 23 equipos: es el que más puntos obtuvo (19 de 21), el de mejor diferencia de gol (+13, con 15 a favor y dos recibidos) y uno de los dos invictos, condición que casualmente comparte con su clásico rival, Unión, que empató en cinco de las siete jornadas.
Otro mérito de Colón es que supo reaccionar en las dos oportunidades que recibió un gol. Cuando Aldosivi le empató 1-1, el “Pulga” Rodríguez le dio la victoria con un penal a cuatro minutos del final. Este sábado, Platense se había puesto en ventaja al comienzo de la segunda etapa, con un tanto de Facundo Curuchet, delantero surgido en el Sabalero. Colón dio vuelta el resultado en los últimos 25 minutos, con Pierotti, el colombiano Wilson Morelo, de penal, y Rafael Delgado.
Sin la magia del “Pulga”, Domínguez intervino con acierto con los cambios que hizo en la segunda etapa. Morelo y Pierotti –reemplazó al lesionado Leguizamón- ingresaron a los 12 minutos, con la potencia y profundidad suficientes para perforar a un Platense cada vez más lento para cubrir espacios y tomar las marcas. Se hizo visible la diferencia entre un equipo consolidado y otro al que le está costando mucho acomodarse a las exigencias de la primera división.
Fuente: LT10
