Los gasistas matriculados nucleados en la Cámara de gasistas de Santo Tomé denuncian la demora en inspecciones por cortes, por seguridad o falta de pago, todo lo que significa la falta de personal afecta tanto a matriculados como a clientes.

Por reglamento, el plazo de demora establecido para responder ante un caso es de 72 horas, pero «demoran un mes y medio o dos meses, en algunos casos hasta tres meses», advierte Luis Alberto Escher, el presidente de la Cámara de Gasistas de Santo Tomé. Como consecuencia de esta situación, «la gente se siente incómoda, nos trata mal a nosotros. El cliente necesita el gas porque hace mucho frío».

La falta de personal en la calle también es un reclamo del sector. «El inspector llega al domicilio con expediente que dice que lo ingresaron hace 5 días cuando lo mandamos hace más de 15, esto es lo que más nos afecta». Sobre la respuesta dada por Litoral Gas, Escher dice :»No tienen una respuesta, alegan no tener el personal suficiente y debemos acatar lo que ellos dicen, porque en este momento son los que tienen la sartén por el mango».