La concejal justicialista santotomesina Rosana Zamora propuso, mediante un proyecto de ordenanza, que las comisiones administradoras del Fondo de Asistencia Educativa (FAE) y del Fondo de Asistencia Vecinal (FAV), remitan al Concejo Municipal de Santo Tomé información relativa a su funcionamiento, al margen de la que sale publicada periódicamente, con cada entrega, en los distintos medios de la ciudad. Al pedido lo hizo extensivo a las comisiones asesoras del Fondo de Asistencia Deportiva (FAD) y del Fondo de Asistencia Cultural (FAC), los otros dos mecanismos de ayuda institucional e individual (en el caso de los deportistas y distintos artistas) con los que cuenta el municipio.

En su propuesta, en referencia al trabajo de la comisión administradora del FAE, por citar uno de los casos, la legisladora sostiene que debería remitirse cuatrimestralmente copia de las actas surgidas de las reuniones del organismo y que conste en detalle la distribución total de los fondos destinados a las entidades educativas, discriminando cuánto recibe cada una de ellas. En diálogo con este medio, Zamora manifestó que la idea es “estar mejor informados”, a la vez que aclaró que en relación al FAE, por ejemplo, “las entregas se hacen, sí, pero se están entregando recursos pertenecientes a los años 2015 y 2016”.

“Los otros fondos también se están distribuyendo con cierto retraso, pero no de tanto tiempo, sino de unos seis meses”, dijo después la edil, que entre las otras cosas que está requiriendo, en cuanto a la información sobre el FAE, es el detalle de todos los proyectos presentados para cada entrega por los establecimientos educativos, “especificando el ejercicio presupuestario al que los mismos corresponden” y “para que se destinaron esos recursos”. Sean para mantenimiento, ampliación, reparación o nuevas construcciones edilicias.

Reglamentaciones vigentes

En paralelo, Zamora solicitó la descripción de los saldos y movimientos bancarios, ingresos y egresos que se registren en la cuenta especial prevista para tal fin, en el segundo artículo del Decreto Provincial Nº 5.085, de 1968. Por su parte, a la comisión administradora del FAV le corresponderá semestralmente, cursar copia de las actas surgidas de cada reunión de Comisión, donde conste en detalle la distribución total de los fondos destinados a instituciones vecinales, discriminando cuánto recibe cada una de ellas.

También requirió el detalle de los trabajos proyectados (al igual que con las escuelas), sea para el mantenimiento, ampliación, reparación o nuevas construcciones edilicias, para los que se destinaron estos fondos, especificando el ejercicio presupuestario al que los mismos corresponden. Y de igual modo con los saldos y movimientos bancarios, ingresos y egresos que registre la cuenta especial prevista en el tercer artículo de la ordenanza municipal Nº 3.178, del año 2016, cuando fue creado el FAV.

En cuanto a las comisiones asesoras del FAD y el FAC, Zamora entiende que tendrán que enviar copia de las actas surgidas de cada reunión, donde también conste en detalle la distribución total de los fondos destinados a entidades, asociaciones, sociedades o instituciones deportivas y culturales, personas o grupos beneficiados con estos aportes, discriminando cuánto recibe cada uno de ellos, especificando el ejercicio presupuestario al que los mismos corresponden. Y además, los saldos y movimientos bancarios, ingresos y egresos que se registren en las cuentas especiales, en este caso previstas en el articulado de las ordenanzas Nº 2.589 y 2.590, ambas de 2007.

En tiempo y forma

En los fundamentos de su propuesta, Rosana Zamora argumenta que, como parte de la división de poderes, “el Concejo Municipal ha creado gran parte del poderoso cuerpo normativo que plasmó todo lo referido a la participación ciudadana”. Sin embargo, dijo, no forma parte de la toma de decisiones en ese sentido, siendo que, a su vez, le corresponde ejercer el rol de contralor sobre las actuaciones y ejecuciones presupuestarias que el Ejecutivo efectúa para lograr la aplicación del decreto provincial Nº 5.085 (1968) y sus textos normativos modificatorios, es decir las ordenanzas municipales Nº 2.589 (2007), 2.590 (2007) y 3.178 (2016).

“También es necesario generar un canal fluido, que permita que las diversas voces y concepciones políticas, representadas por los ciudadanos a través de los legisladores en el Concejo, propicie el acceso a la información pública, para que todos podamos conocer la periodicidad y las formas de distribución de los fondos que aportan los contribuyentes a través de tasas y tributos”, concluyó.

Fuente: El Litoral