A pocos días de cumplirse un mes del cierre del Puente Carretero Santa Fe – Santo Tomé, un ingeniero civil consultado por AIRE aconsejó que todo el tránsito del viaducto circule sobre el Bailey “para evitar una sorpresa de que ese tramo se caiga, porque si se cae, se cae de golpe. No va a avisar mucho”. Es que la estructura metálica fue instalada para permitir el paso exclusivo del transporte público de pasajeros, pero crece la preocupación sobre el tramo dañado.

El ingeniero Guillermo Ferrando, quien también trabajó casi 30 años en Vialidad provincial, indicó puntualmente que “habría que analizar la posibilidad de que el tránsito liviano, es decir, motos, bicicletas y peatones, pasen también por el puente Bailey porque ya se encuentra demasiado marcada la diferencia, por lo menos en la mano que va de Santa Fe a Santo Tomé, y no podemos confiar en que fracasen los apoyos”. Y agregó: “Si llega a haber una falla, no va a haber otro preaviso. Eso se cae de golpe”.

A casi 50 años de la última intervención importante sobre el Puente Carretero Santa Fe – Santo Tomé, Ferrando sugirió realizar una inspección general del viaducto durante los trabajos de reparación que, según se estima, comenzarán las próximas semanas. “En el año 1977 se aplicó una solución en la mayoría de estas juntas que aguantó el tránsito pesado hasta que se cortó su paso por Santo Tomé, es decir, esos soportes adicionales que se colocaron en aquella época funcionaron hasta ahora”, explicó el especialista. Y agregó: “Justamente en la junta que está fallando no se puso y tengo entendido que en al menos otras tres que tampoco se puso este soporte adicional. Que le pongan los soportes adicionales, que entiendo que está contratado también con la misma empresa y vamos a tener puente para rato”.

Si bien aún no hay una fecha precisa, se estima que durante los primeros días de mayo se instalará el obrador con las máquinas para llevar adelante las tareas sobre el tramo dañado que se encuentra en cercanía de la cabecera santafesina.

Fuente: Aire de Santa Fe