La directora Victoria Bravo volvió a dialogar con Aire de Santa Fe como lo hizo el martes por la mañana después de la noche anterior en que los delincuentes se llevaron 15 netbooks y 18 cargadores. Ese mismo día, Bravo comunicó lo ocurrido a la Regional IV de Educación y se tomó la determinación de instalar un sistema de alarmas pero no alcanzaron 48 horas porque este jueves volvieron a robar, a pesar de que desde la institución solicitaron el apoyo de la Comuna para que la camioneta de Prevención custodie el lugar mientras se instalaba el circuito pero eso no ocurrió.

“Nunca me hubiese imaginado que en el término de 48 horas iban a volver a entrar y esta vez dejaron las puertas de madera cerradas para que nadie se diera cuenta. Le siguen robando el futuro a los chicos” argumentó Victoria porque los alumnos de esta escuela en su mayoría son de la costa donde no llega el wifi así que la única manera de estar conectados que tienen es mediante las netbooks y tablets en el establecimiento educativo. La directora se lamenta porque no le dieron tiempo a colocar las alarmas mientras asegura que seguirán luchando para que los alumnos salgan adelante. El principal inconveniente que genera en la comunidad educativa este tipo de delitos es el atraso en el tiempo porque hay que volver a adquirir el material, mientras desde la institución venden prepizzas a $150 para que los chicos tengan una golosina para el Día del Niño.

Fuente: Aire de Santa Fe