Más de 600 profesionales de toda la provincia, incluidos muchos de Santo Tomé, se formaron durante tres meses para ser la primera línea de defensa de la comunidad en los momentos más críticos.

SANTA FE – En un evento de profunda significancia para el sistema de salud provincial, el pasado martes se escribió un nuevo capítulo en la historia de la atención de emergencias en Santa Fe. En el Auditorio del CEMAFE, se realizó el cierre presencial de un Curso de Actualización en Enfermería en Emergencias que ha preparado a más de 600 profesionales para ser los guardianes de la vida en situaciones extremas.

Esta propuesta formativa, catalogada como inédita por profesionales de la salud, fue una creación de enfermeros para enfermeros, impulsada por el Ministerio de Salud a través de la Secretaría de Gestión del Conocimiento y SeLIAR (Sistema de Emergencias, Logística Integrada y Articulación de Redes). Durante tres meses, con una carga horaria intensiva de 132 horas, la capacitación combinó instancias virtuales de alto nivel con cruciales encuentros presenciales en cada uno de los cinco nodos territoriales de SeLIAR.

La cifra de más de 600 profesionales que culminaron esta formación no es solo un número; es una red de conocimiento y acción que se extiende por toda la geografía santafesina. Desde grandes hospitales hasta efectores de atención primaria, la capacitación ha llegado a cada rincón, asegurando que la calidad del cuidado en urgencias y emergencias no sea un privilegio, sino un derecho accesible para todos. Cabe destacar la significativa participación de enfermeros de la ciudad de Santo Tomé y de toda la red SeLIAR, lo que consolida un equipo cohesionado y preparado para responder ante cualquier desafío.

La Enfermería como Pilar Indiscutible del Sistema de Salud

En cada accidente en la ruta, en una crisis cardiovascular en un hogar, en el traslado de un bebé prematuro o en la estabilización de un paciente grave, hay una figura que es el epicentro de la acción: el enfermero de emergencias. Este curso ha consagrado a la enfermería como el pilar fundamental e insustituible de la atención, destacando su rol protagónico por encima de cualquier otro eslabón de la cadena de atención. Son ellos quienes, con sus conocimientos y su templanza, garantizan la supervivencia y el bienestar en los primeros minutos, que suelen ser los más decisivos.
El temario de esta capacitación de vanguardia fue diseñado para abordar el abanico completo de situaciones críticas. Los profesionales se entrenaron en:

• Manejo inicial del paciente agudo crítico: Adquiriendo las habilidades para evaluar y estabilizar a un paciente en los primeros minutos cruciales, marcando la diferencia entre la vida y la muerte.
• Reanimación cardiopulmonar (RCP) adulto y pediátrica: Actualizando las técnicas para reactivar un corazón o una respiración detenida, con un enfoque específico para adultos y, lo que es crucial, para la población pediátrica.
• Traslado neonatal: Capacitándose en los protocolos para el manejo de neonatos en situaciones de riesgo, asegurando que el cuidado continúe de manera segura durante el traslado.
• Farmacología en emergencias: Conociendo en profundidad el uso de medicamentos en situaciones de urgencia, donde la precisión es vital.
• Restricción espinal y diversidad de género en la atención prehospitalaria: Abordando aspectos modernos de la atención, como la protección de la columna vertebral y la inclusión de una perspectiva de género para brindar un trato respetuoso y equitativo a todos los pacientes.

Un Compromiso que Trasciende la Capacitación

El acto de cierre fue una verdadera celebración del compromiso. El Auditorio del CEMAFE se llenó de facilitadores especializados, coordinadores de formación y equipos de salud que compartieron experiencias y proyecciones. La emoción era palpable en el ambiente, reflejando el orgullo por una política pública que refuerza el compromiso con una enfermería capacitada, activa y protagonista.

“Esta formación nos da la confianza y las herramientas para actuar con precisión en los momentos más difíciles. Sabemos que somos la primera cara que ve un paciente en su peor momento, y ahora nos sentimos más preparados que nunca para ser esa mano firme y ese conocimiento que puede salvar una vida”, compartió visiblemente emocionada una de las enfermeras asistentes.
Este curso no solo representa una inversión en el capital humano del sistema de salud, sino un compromiso directo con la calidad de vida de las y los santafesinos. Con cada profesional formado, la provincia fortalece su red de emergencias, asegurando que el cuidado de calidad esté garantizado para todos, demostrando que la enfermería es y seguirá siendo el pilar de la salud y el bienestar de nuestra comunidad.