Colón igualó 0 a 0 ante Chaco For Ever por la fecha 35 de la Primera Nacional. El partido fue reñido, con constantes faltas y discusiones acaloradas entre los jugadores. El travesaño salvó al Sabalero en dos ocasiones. En el equipo local Nievas vio la roja por doble amonestación y Guille por insultar al árbitro.

El Sabalero ya venía con problemas incluso antes de pisar el campo de juego. Todo se debió a unos cambios de último momento en la alineación titular, provocados por un virus que, al parecer, es respiratorio. Como resultado, Federico Jourdan tuvo que ser sacado del equipo titular, lo que llevó a que Sebastián Prediger entrara a la mitad de la cancha. Para completar la reestructuración, Nicolás Talpone tuvo que moverse y ocupar la banda derecha del Sabalero.

Lo que realmente le daba un colorido especial a las tribunas era la presencia de los hinchas Sabaleros en la tribuna visitante. La atmósfera se llenaba de un sentimiento de camaradería entre ellos y los hinchas chaqueños, que se unieron en un ambiente poco habitual para el fútbol argentino.

Después del pitazo inicial que dio Luis Lobo Medina, todas esas cordialidades que se estaban viendo en las tribunas se dejaron de lado. En su lugar, empezaron a aparecer constantes roces, choques y agarrones entre los jugadores de ambos equipos.

A pesar de que hubo poca continuidad en el juego, Colón seguía mostrando un planteo bastante parecido al que había utilizado en su partido contra Defensores de Belgrano. El equipo se mantenía ordenado en el campo, y las posiciones de ataque eran bastante fijas. Tanto Rossi como Braian Guille estaban marcando hombre a hombre a los defensores del equipo local, lo que hacía que Colón estuviera llevando el juego mucho más cerca del arco del equipo rival.

Hubo que esperar un total de 17 minutos para ver a Guille hacer una jugada individual. Enganchó hacia adentro desde el costado derecho y, en el momento en que decidió rematar, su tiro fue controlado sin problemas por el arquero Canuto.

Colón se salvó cuando un centro logró superar a toda la defensa Sabalera. Fue entonces cuando Valenzuela apareció completamente sin marca, lo que le permitió conectar el balón de primera. Sin embargo, su remate pegó en el travesaño del arco que estaba defendido por Vicentini.

Con muy poco, Chaco For Ever lograba generar algunas dudas en el equipo del Sabalero. Esto ocurrió después de un nuevo pelotazo que terminó golpeando el travesaño. Todo sucedió tras un córner y una salida defectuosa del arquero Rojinegro, que no pudo despejar bien. Fue en ese momento que un jugador chaqueño aprovechó la situación y cabeceó la pelota, pero su disparo rebotó contra el travesaño.

En el equipo Sabalero, Guille se destacaba como uno de los jugadores más peligrosos para la defensa local. Su habilidad con la pelota en los pies lo convertían en una verdadera pesadilla para los defensores, ya que era el único que intentaba llevar peligro al arco defendido por Canuto.

El segundo tiempo arrancó con el equipo chaqueño mostrándose un poco más dominante en el campo que el Sabalero. Esto se debía a que el mediocampo dirigido por Diego Osella estaba cometiendo varias imprecisiones en sus jugadas, lo que les costaba un poco mantener el control del juego. Con el partido avanzando, Osella ya empezaba a pensar en los posibles cambios que podría hacer para mejorar el rendimiento del equipo y así buscar la tan ansiada victoria.

El director técnico de Colón comenzó a hacer cambios en el equipo, moviendo el banco de suplentes para tratar de darle un nuevo aire al partido. Primero, decidió hacer ingresar a Toledo por Rossi, buscando aumentar las opciones del Sabalero en el juego aéreo, que es algo que podría marcar la diferencia en un partido tan reñido. Para lograr esto, sacó a Forneris y, poco después, hizo entrar a Garrido, lo que permitió que Talpone pudiera volver a ocupar su posición habitual al lado del “Perro”. Además, esto fue un alivio para Sebastián Prediger, quien, hay que decirlo, no estaba teniendo su mejor actuación en el campo en ese momento.

El partido continuaba con la misma dinámica que había mostrado en la primera mitad. Todo seguía muy trabado y luchado, con pocas oportunidades de juego real. Parecía que los equipos no lograban encontrar la manera de entrar al área rival, así que se plantearon otra estrategia. ¿Y si en lugar de acercarse al arco, probaban desde lejos? Así que los chaqueños decidieron probar suerte con un par de remates potentes desde fuera del área. Estos disparos obligaron a Vicentini a actuar, y en ambas ocasiones, el arquero del Sabalero se lució con buenas intervenciones, manteniendo su arco en cero.

Ya acercándonos a los últimos diez minutos del partido, Chaco For Ever se quedó con un jugador menos en la cancha. Todo ocurrió porque Nievas recibió su segunda tarjeta amarilla, que lo dejó fuera del juego. La primera amarilla se la habían mostrado por un agarrón a Rossi en el primer tiempo, y luego, para colmo, cometió una falta bastante dura sobre Soñora en la mitad del campo.

Braian Guille recibió la tarjeta roja al final del partido tras tener un cruce con el árbitro asistente, al que insultó.

A lo largo del encuentro, el Sabalero no logró mostrar un buen rendimiento y apenas generó unas pocas situaciones de peligro sobre el arco defendido por Canuto. Como resultado, Colón regresa a Santa Fe con las manos vacías, dejando pasar una valiosa oportunidad para acercarse a la cima de la zona B, algo que realmente necesitaba en este momento del torneo.

Fuente: FM SOL