Con la partida de Nereo Fernández de Unión, las expectativas de los arqueros del club creció. Esto atendiendo a que entendían que podían pelear mano a mano por la titularidad. Estaba latente la opción que regrese Matías Castro, pero como esto finalmente no se dio la ilusión se mantenía. Sin embargo, el arribo de Sebastián Moyano cambió un poco las cosas. Hoy el que partiría como titular es Marcos Peano, pero no la tendrá fácil con una incorporación que, si bien llega de ser suplente en Gimnasia (LP), tiene recorrido en el ascenso y experiencia en Primera División. Aunque el que quedó más atrás en la consideración es Joaquín Papaleo, que comenzó a darse cuenta que sus chances iban a ser muy remotas.

Tanto es así como en las últimas horas recibió el llamado del secretario deportivo Martín Zuccarelli, que le comunicó que deberá buscarse club. Una situación que cambió de la noche a la mañana, pero que el entrenador Leonardo Madelón tenía bien en claro. Al parecer, todavía no lo ven preparado para ser el dueño del arco rojiblanco y se apostó por otro apellido. El santotomesino, de 25 años (23 de marzo de 1994), analiza ya nuevas propuestas, como una firme de Santamarina de Tandil, donde tuvo un paso hace dos años más que auspicioso, siendo pieza clave. Aunque la idea de su representación es llegar a un acuerdo para la salida definitiva, ya que tiene contrato vigente. Directamente lo que se solicitaría es que se le rescinda el vínculo, algo que los dirigentes tratarán de esquivar.

De esta manera, se agrega al éxodo que arrancó con las salidas de los hermanos Pittón a San Lorenzo y de Diego Zabala a Rosario Central. El mismo camino podría seguir Franco Fragapane, sin dejar de mencionar la finalización de los arreglos de Jonathan Bottinelli y Damián Martínez. Papeleo salió de las inferiores de Unión tiene un solo partido en Primera, que fue justamente en último clásico disputado en el Brigadier López que terminó 0-0. En aquella ocasión le tocó ser titular a raíz del desgarro que sufrió Nereo Fernández una semana antes. Era la oportunidad que tanto estaba esperando, pero una jugada desafortunada en el primer tiempo hizo que debiera dejar el partido por lesión.

Fue tras un córner en el que un balón impactado por Guillermo Ortiz le dio en el ojo. Se le hizo un edema que demandó que sea trasladado al Hospital Cullen. Lógicamente se fue desconsolado por la situación y el que ingresó fue finalmente Marcos Peano, quien completó el partido con el arco en cero. Después perdió terreno hasta esta situación, en la que deberá alejarse de la institución que lo formó. Será cuestión de ver si hay más novedades al respecto, pero lo concreto es que Unión se quedaría con tres goleros: Peano, Sebastián Moyano y Alan Sosa.

Fuente: UNO Santa Fe