Dandole continuidad a una ola de robos y de situaciones delictivas que no se detiene y que no distingue de víctimas y de lugares, en la jornada de este martes 17 uno de los espacios religiosos que tiene Santo Tomé se transformó en escenario de un robo en el que afortunadamente no hubo que lamentar víctimas de ningún tipo. Según informaron hoy fuentes policiales, en horas de la noche y aprovechando la oscuridad de la zona, uno o más delincuentes lograron acceder al edificio donde funciona la capilla Nuestra Señora de Guadalupe, pudiendo sustraer múltiples objetos de valor antes de darse a la fuga sin dejar rastro alguno.

Vale la pena recordar que la mencionada capilla está ubicada en la esquina de las calles Roque Saénz Peña y Vélez Sarsfield, recibiendo periodicamente a una nutrida congregación de fieles que participa activamente en múltiples tareas de contención social y religiosa. De acuerdo a lo poco que pudo trascender sobre el hecho, los responsables del mismo pudieron ingresar al inmueble luego de provocar destrozos en las ventanas exteriorees. Una vez adentro, el o los malvivientes recolectaron aquellos elementos de valor que encontraron a la vista para darse inmediatamente a la fuga sin que ningún vecino o transeúnte pudiera convertirse en testigo ocasional de lo sucedido. Si bien se realizó la correspondiente denuncia, hasta el momento se desconocen mayores detalles acerca de la identidad de los responsables de este lamentable episodio.