
La provincia de Santa Fe avanza en una planificación para cuando llegue el momento en que alumnos y docentes tengan que regresar a las aulas. Este jueves, la ministra de Educación de Santa Fe, Adriana Cantero, explicó cómo es la estructura del plan de vuelta a clases en la provincia y aclaró que aún debe aprobarla el Consejo Federal. Además, dijo que la fecha del inicio de las actividades escolares se definirá de acuerdo a cómo evolucione la curva de casos de coronavirus en la provincia durante la última semana de las vacaciones de julio. “Tenemos la estructura del plan, que debe ser aprobada por el Consejo Federal. Todas las provincias van a presentar un plan en el marco de un documento a aprobarse este jueves”, contó la ministra. Y dijo que se están por definir los protocolos.
Gradual, semipresencial y con distanciamiento
En una entrevista en Aire de Santa Fe, la ministra de Educación afirmó que ya hay un plan estructural sobre cómo será el regreso a los establecimientos educativos. “Será una vuelta gradual, escalonada pero en un formato escolar diferente. Ya no vamos a tener las aulas de 35 o 40 chicos. En las aulas con distanciamiento social probablemente no habrá más de 15 estudiantes, que además tienen que aprender a desplazarse con protocolos sanitarios”, contó. “Además, habrá días de clases en las escuelas y días en los que deberán continuar el aprendizaje en casa. Vamos a un camino de un sistema semipresencial, al menos en el tiempo pospandémico”, dijo la ministra. Respecto a cómo serían las gradualidades, detalló: “Primero habrá una etapa de concientización, de difusión, de conversación con la comunidad sobre los nuevos formatos escolares de acuerdo con los sindicatos, y un tiempo de preparación en las escuelas de todo el personal docente y no docente para comenzar el nuevo estilo de cursado”, explicó Cantero.
“Además, habrá días de clases en las escuelas y días en los que deberán continuar el aprendizaje en casa. Vamos a un camino de un sistema semipresencial, al menos en el tiempo pospandémico”, dijo la ministra.
Luego, llegará la etapa de “intensificación pedagógica” que durará 15 días. Esta etapa abarcará a los “grupos prioritarios”, es decir, los estudiantes de las zonas rurales, que se vieron fuertemente afectados por la falta de conectividad, y a los alumnos de primer grado, séptimo grado y el último año de la secundaria. “Posteriormente se van a ir incorporando todos los grupos en un régimen de alternancia semanal”, contó Cantero. Sin embargo, se trata de un plan estructural pero las fechas para su ejecución aún no están definidas. “No estamos difundiendo fechas. Eso va a tener que ver con el informe epidemiológico. Si cuando volvemos de las vacaciones de julio estamos con la curva controlada, podríamos empezar en agosto la gradualidad. Si no está como hoy la curva, y el peligro se incrementa, no podremos volver en agosto. No podemos dar una fecha cierta”, cerró.
Aprobaron por unanimidad los protocolos para la vuelta a las clases en escuelas: el objetivo es agosto
El ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, presidió esta tarde la 97ª Asamblea del Consejo Federal de Educación (CFE) en la que se aprobó de manera unánime el documento “Protocolo Marco y lineamientos federales para el retorno a clases presenciales en la educación obligatoria y terciaria”. Con la participación de ministras y ministros de educación de las 24 jurisdicciones, esta resolución que fija los lineamientos obligatorios marco y recomendaciones generales, que le permitirá a cada provincia y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, elaborar planes progresivos y acorde a sus particularidades que garanticen un retorno seguro a los establecimientos en el momento en que la situación epidemiológica lo permita.
El titular de la cartera educativa nacional, sostuvo: “Esta reunión es parte de la estrategia conjunta que venimos transitando para poder proyectar un regreso seguro a las aulas, priorizando siempre la salud de toda nuestra comunidad educativa. La realidad de la circulación del COVID-19 en el país es muy diversa, por eso sostenemos la importancia de la construcción de consensos ayudando a contener y derribar los lógicos temores que pueden tener nuestras familias, docentes y estudiantes”. A su vez, Trotta se refirió a los próximos pasos que se llevarán adelante: “Partimos de una base, como señala el DNU, relacionada a la situación de la circulación del virus; luego, la preparación de las escuelas, garantizar la seguridad e higiene. También, tenemos la obligación de avanzar en las instancias de formación y capacitación del personal docente y no docente de cara a la vuelta a las escuelas, al mismo tiempo que prepararemos a nuestras y nuestros estudiantes y familias para la nueva normalidad de las aulas”.
El protocolo marco y los lineamientos federales establecen un conjunto de pautas de trabajo que promueven un ordenamiento en las actividades inherentes al retorno a las clases presenciales, basadas en criterios sanitarios y salud y seguridad en el trabajo, así como de organización escolar y pedagógica. El documento constituye un piso mínimo de requerimientos para la apertura de instituciones educativas, a partir de los cuales cada jurisdicción podrá agregar criterios adicionales y adecuarlos a la realidad local. Estas pautas básicas para el rediseño de la dimensión física y de los flujos del movimiento dentro de la escuela se basan en el distanciamiento físico, el tiempo de exposición, la dinámica del aire y la higiene personal.
Modalidades de la vuelta a la escuela
La reanudación de las clases presenciales en el país tendrá las siguientes características: se realizará a través de un escalonamiento progresivo, de acuerdo con criterios epidemiológicos de evolución de la pandemia y las características sociodemográficas de cada región y la asistencia será alternada por grupos de alumnos/as de manera de garantizar el cumplimiento de las normas de distanciamiento social, articulando tiempos de presencialidad y de no presencialidad bajo un modelo “bimodal”. Para ello, resulta imprescindible volver a mirar pedagógicamente la planta física de la escuela, imaginar la nueva jornada escolar (desde el inicio a la finalización), establecer un orden desde la llegada de los desplazamientos y la utilización de cada uno de sus lugares, considerando que la estructura edilicia también es educativa. Cada jurisdicción podrá construir reglamentaciones propias complementarias. Para ello, las provincias deberán presentar un Plan Jurisdiccional de retorno a clases presenciales ante el Ministerio de Educación de la Nación, a través de la Secretaría General del Consejo Federal de Educación. El mismo deberá contemplar en su organización y alcances, lo establecido en el documento acordado y tener la aprobación de las máximas autoridades educativas y sanitarias de cada jurisdicción.
Fuente: Aire de Santa Fe / LT9
