El Club Atlético Unión le ganó 3-2 a Banfield y sigue sumando en el Torneo de la Liga Profesional de Fútbol. El Tatengue, con su equipo «muletto», sigue sumando triunfos, llegó a las 13 unidades y pelea en la parte alta de la tabla.
El equipo «muletto» de Unión, tal como lo hizo en las últimas fechas, jugó con fluidez, criterio y fue protagonista del juego desde temprano. A segundos de cumplirse cinco minutos de partido, tras una buena jugada colectiva por el sector izquierdo, Bryan Castrillón definió de frente al arco para poner el 1-0 para el Tatengue que confirmaba su buen inicio sobre el campo. El tanto del Rojiblanco bajó las revoluciones del equipo de Gustavo Munúa. Si bien se esperaba el efecto contrario, el conjunto santafesino se relajó y Banfield, apretado por el resultado fue en busca del empate. Con mucho juego por las bandas, el Taladro intentó profundizar para generar espacios en el fondo de Unión.
Con un centro desde la izquierda, Ramiro Enrique le ganó a su marcador por el sector opuesto y empujó la pelota a gol para poner el 1-1. Luego de consultar al VAR, el árbitro convalidó el gol y los equipos se emparejaban, al menos, desde el marcador. El encuentro se tornó de ida y vuelta, de mucho juego físico y disputado en varios sectores. Cuando las emociones escaseaba, Unión volvió a golpear para volver a ponerse en ventaja. Con un centro desde la izquierda, Daniel Juárez aprovechó otra de las varias desatenciones defensivas que ofrecía el fondo del Taladro y, de cabeza, puso el 2-1 a favor de los de Munúa.
Segundo tiempo
Este equipo alternativo del Tate sabe a lo que juega, consciente de sus limitaciones, no busca lucir, sino ser efectivo. Enfocado en ser sólido en defensa, Unión jugó de contraataque con un Banfield que mostró serias falencias defensivas. El Taladro buscaba ser protagonista, jugaba con la pelota, moviéndola de un lado a otro y ponía a correr a sus delanteros contra el arco de Sebastián Moyano. Ramiro Enrique, con gran olfato goleador y capacidad para alcanzar velocidad máxima en una distancia corta, picó al vacío para definir de derecha dentro del área, marcar su segundo tanto en el partido e igualó las cosas.
Pero al igual que en la primera parte, la alegría no le duraría mucho al local. Poco después del tanto de Enrique, nuevamente de contraataque Unión se puso en ventaja con un gran cabezazo de Ezequiel Cañete por encima de Enrique Bologna. El Rojiblanco hizo una transición feroz de defensa a ataque y estampó el 3-2 ante la incredulidad del arquero que no pudo hacer nada ante la gran definición del 10. El tramo final fue de extrema tensión, con el local empujando con lo que le quedaba para intentar empatar, mientras Unión se defendía con uñas y dientes.
Sebastián Moyano agigantó su figura en estos minutos y sostuvo a su equipo. El mendocino fue clave para que el Tatengue se quede con los tres puntos y siga subiendo en la tabla. Con esta victoria, Unión alcanzó las 13 unidades y ocupa, provisoriamente, la tercera posición de la tabla. El equipo «muletto» da muestras de su valor y pone al entrenador en apuros, en esos problemas que todo DT quiere, tener un plantel repleto de jugadores dispuestos a entrar, jugar y rendir.
Fuente: Aire de Santa Fe