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por
la redacción
Una violenta entradera se produjo el jueves a las 22.30 en una casa ubicada en Derqui 1900 del barrio Sargento Cabral de la ciudad de Santa e. Tres ladrones entraron y ataron de manos a los siete integrantes de una familia. Se alzaron con más de $55.000, una notebook y una máquina de cortar el cabello. Mientras cometían el asalto, llegó personal de la Brigada Motorizada por un llamado al 911 que hizo el papá de la amiga de una de las víctimas del asalto. Los ladrones escaparon por los techos y en la huida descartaron un celular y auriculares que habían robado. Los efectivos alcanzaron a uno de ellos.
Emilce, una vecina de la familia contó que un joven salía con su moto de la casa cuando lo interceptaron los ladrones que llegaron caminando. “Le dijeron abrí la puerta si no te matamos. Revolvieron todo, le pedían dólares como si tuvieran algún dato, estaban sacados. La chica más grande estaba conectada por celular con una amiga y le contó lo que pasaba. Fue el papá de esa chica el que llamó al 911. Los delincuentes entraron cuando la familia estaba terminando de cenar, no los golpearon”.
Cuando los policías llegaron a la casa, escucharon gritos que provenían del interior, encendieron la sirena del patrullero y los delincuentes escaparon. Cuando entraron los uniformados al inmueble se encontraron con una mujer con las manos atadas que les indicó a dónde estaba el resto de la familia en las mismas condiciones. El resto de los policías persiguió a los delincuentes y lograron detener a A.R. de 18 años, quien tiene domicilio en la ciudad de Santo Tomé y quedó a disposición de la justicia.
Posteriormente tomó intervención en el caso la fiscal María Laura Martí quien dispuso que el delincuente quede detenido y sea identificado por robo calificado. Los peritos de la Agencia de Investigación Criminal trabajaron en el levantamiento de pruebas en el interior de la casa donde se produjo la entradera.
Fuente: Aire de Santa Fe
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