Una joven de 21 años, que cursa un embarazo de dos meses, denunció a su novio luego de una serie de hechos de violencia de género. Alejandro T. fue detenido e imputado por la fiscal Lucila Nuzzo, quien solicitó la prisión preventiva. La jueza Sandra Valenti avaló los hechos endilgados por la fiscal, y dictó la prisión preventiva en una audiencia que se prolongó durante varias horas por la oposición de la defensora pública, Andrea Alberto.

Varios hechos

El primero de los delitos imputados por Nuzzo tuvo lugar el 11 de julio, cuando Alejandro T. y su novia se dirigían caminando desde Santo Tomé hacia la casa de un familiar en el barrio San Lorenzo de Santa Fe. La fiscal sostuvo que en un determinado momento la joven necesitaba sentarse a descansar, situación que molestó al muchacho y procedió a propinarle golpes en la cabeza y tomarla de los pelos, “manifestándole que ella debía seguirlo a donde vaya”, precisó Nuzzo. El segundo episodio ocurrió más tarde ese mismo día, cerca de las 20, en la vivienda de barrio San Lorenzo. “La tomó a Antonela de uno de sus brazos llevándola hacia el exterior, donde le tiró de los pelos y le propinó varios golpes de puño en la cabeza y luego le manifestó que se salvaba porque estaba embarazada, que si no lo la iba a matar, todo esto basándose en la relación desigual de poder entre ambos”, detalló la fiscal.

Dos días después, el 13 de julio, cerca de las tres de la mañana, sucedió el tercer episodio de violencia imputado por Nuzzo; en esta oportunidad, el imputado le exigía a su novia que se pare en una esquina simulando ejercer la prostitución, para poder él asaltar a quienes se detuvieran. Según sostuvo la fiscal, ante la negativa de la joven, el imputado la agredió con un cachetazo. Más tarde ese mismo día, siendo aproximadamente las 11 de la mañana, la llevó hasta la casa de su primo en barrio San Lorenzo, y se fue a bordo de la moto de su primo y llevándose consigo el celular de Antonela. El imputado le dijo que “quería estar solo, pero que si se enteraba que Antonela tenía otra relación con otra persona la iba a matar”, precisó Nuzzo. Al día siguiente, el miércoles 14 de julio, la hermana de Antonela fue a la casa del imputado en Richieri al 3700 de Santo Tomé, con el fin de retirar las pertenencias de su hermana. Según endilgó la fiscal, el imputado se negó a entregar las prendas de vestir, como así también ropa de bebé y del teléfono celular Motorola G4.

Finalmente, la última situación violenta se produjo el jueves 15 de julio, minutos antes de las cuatro de la tarde, mientras se encontraba en las inmediaciones de Avenida Lujan al 4000. La fiscal sostuvo que el imputado abordó violentamente a Antonela “profiriendo gritos e insultos, manifestándole que la iba a matar y que iba a ir “familia por familia”, expresándole “me dejaste re pegado, me arruinaste la vida”, “te salvas porque estás embarazada” “te voy a matar, no me busques porque no sabes con quién te estás metiendo”, en alusión a la denuncia policial realizada por la víctima el día anterior. Nuzzo agregó que tras los insultos, el joven la empujó contra las rejas de un local comercial que se encontraba en el lugar y le propinó un golpe de puño en la boca, mientras le decía todo el tiempo que la iba a matar, que la iba a tirar al río, arrugando el papel en el cual se le notificó la medida de distancia.

Calificación legal

Los hechos descriptos fueron calificados como lesiones leves dolosas reiteradas calificadas por ser cometidas por un hombre hacia una mujer en el marco de violencia de género, hurto, amenazas e incumplimiento de mandato judicial, en concurso real entre sí.

Fuente: Aire de Santa Fe