Un hombre de 34 años oriundo de Santo Tomé aceptó esta mañana una sentencia a seis meses de prisión de cumplimiento efectivo por tentativa de estafas. Fue en una audiencia de admisión de procedimiento abreviado desarrollada en la sala 2 del subsuelo de tribunales. El acuerdo fue presentado por el fiscal Estanislao Giavedoni y la defensora pública Leticia Feraudo, en representación del imputado Maximiliano David Maldonado. La jueza Rosana Carrara dio por admitido el acuerdo y dictará sentencia dentro del plazo de ley.

Estafa frustrada

El 13 de junio de este año, Maximiliano Maldonado, vestido de overol y calzado de trabajo, tocó el timbre de una vivienda en calle Solís al 2700 de Santo Tomé. Cuando la dueña de casa abrió la puerta, el hombre se presentó como empleado de Litoral Gas y dijo que, según el medidor, podía haber una pérdida de gas. Maldonado pidió ingresar a controlar el calefón, y cuando la mujer le respondió que en la vivienda había termotanque, el hombre le pidió $2800 para comprar una serpentina, y que la mano de obra iba por cuenta de la empresa. Sospechando que podía tratarse de una estafa, la mujer dio aviso al 911. Brindó una descripción de Maldonado y la ropa que tenía puesta, que permitió al personal policial aprehenderlo a pocas cuadras del lugar.

Tercera causa

Maldonado fue detenido, imputado por el delito de estafa en grado de tentativa y quedó en prisión preventiva. Al finalizar la audiencia esta mañana el fiscal explicó que al momento de cometer este último hecho, el imputado estaba ejecutando una pena por hechos similares. La primera sentencia a Maldonado es del año 2016, cuando fue condenado a tres años de ejecución condicional por hechos de estafa simulada y tentativa de hurto. En el 2018 volvió a ser detenido por los mismos delitos. En esa oportunidad se lo condenó a un año y seis meses de cumplimiento efectivo, computándose con la pena anterior.

Ahora, con esta nueva sentencia pasará tres años y seis meses en prisión, con declaración de reincidencia, sin posibilidades de acceder a beneficios en la ejecución de la pena. Al finalizar la audiencia el fiscal explicó desde el móvil de la radio que “se hacía pasar por empleado de la EPE, o de Litoral Gas, vestido con overol y zapatos de trabajo pero nada que lo identificara con la empresa”.

Fuente: Aire de Santa Fe