Una vez más los hinchas Sabaleros dieron muestras de su amor incondicional por los colores rojo y negro, como lo vienen haciendo desde 1905, cuando un grupo amigos en edad escolar se juntaban frecuentemente a jugar a la pelota en un terreno baldío la ciudad de Santa Fe.

Con el paso del tiempo a través del vínculo de amistad y la pasión por el futbol comenzaron a pensar en crear un Club. Uno de los tantos días que se juntaban a jugar, el grupo de amigos fue a la casa de Rebechi a buscarlo para que se sume al equipo de futbol de ese día, este niño estaba estudiando historia y la madre no lo dejaba salir a jugar.

Al retirarse se acuerdan que su maestra de escuela les había dado como tema para estudiar los viajes de Cristóbal Colón. Aníbal Rebechi propone dar este nombre al club. De esta manera y con la aprobación de todos los integrantes del grupo se pasan a llamar «Colón Foot-Ball Club» Colón es el club que representa a la mayoría de los santafesinos, en el corazón de barrio centenario es la cuna de felicidad de todos los sabaleros… Sabaleros porque en sus inicios los primeros hinchas del club eran humildes pescadores que se dedicaban a la pesca de sábalos, por eso el tradicional sobrenombre.

En la noche del sábado una multitud marchó en caravana desde la Costanera santafesina hasta la sede del club en el sur de la capital provincial, para recibir a la hora 00,00 este nuevo 5 de mayo , día en el que el Club Colón de Santa Fe cumple 119 años de vida.

Todo se inició ayer pasadas las 19 horas, cuando lentamente los simpatizantes rojinegros se congregaron frente a Telefe Santa Fe para pasadas las 20 partir en la tradicional caravana hacia el centro de concentración de cada aniversario, que es de cara al mismo estadio Brigadier López.

Una vez que arribó la marea sangre y luto a la intersección de las calles J.J.Paso y Bv.Zavalla, se encontraron con otra gran cantidad de público que optó por ir directamente a la zona de los festejos.

Hubo mucha juventud, familia, color, calor y la pasión de siempre, esa que de manera incondicional despiertan estos colores, por encima del torneo que se juegue o de quienes la representen.

Con la fe intacta, la pasión desbordante de siempre, la estrella con orgullo en la bandera y al grito de «vamos a volver…», la patria Sabalera vivió otra noche inolvidable, como suele ocurrir cuando estos colores convocan en el barrio Centenario.

Fuente: Soy Deportes