La prestación del servicio de colectivos en la ciudad de Santa Fe durante este viernes será una incógnita. Es que, según advirtió en un comunicado interno dado a conocer este jueves por la tarde, la Unión Tranviaria Automotor (UTA) realizará durante la mañana del viernes un plenario de delegados en donde podría definirse algún tipo de retención de tareas. Durante esa actividad gremial, el servicio de transporte público de pasajeros será reducido. En el mismo texto, aseguran que es “inminente” la concreción de nuevas medidas de fuerza debido a que, hasta el momento, no percibieron sus salarios con los aumentos acordados en paritarias. Se trata del conflicto que terminó con un paro de colectivos la semana pasada. Este jueves, los choferes de las líneas 2 y 16 decidieron llevar a cabo una asamblea informativa. Hasta el momento, los trabajadores no recibieron información sobre la manera en que recibirán el dinero.
“Si no nos dicen como van a pagar las deudas, vamos a intensificar las medidas, sin lugar a dudas”, advirtieron desde UTA Santa Fe. Cabe aclarar que la asamblea de choferes fue informativa y no repercutió en la prestación del servicio en la ciudad.
Tal como lo adelantara AIRE el pasado martes, las cámaras empresariales del transporte plantearon a principios de esta semana que el pago de lo que se debe se realizaría en cuatro cuotas: 25 de julio, 25 de agosto, 25 de septiembre y el cuarto día hábil de octubre. En total, se calcula que en promedio se adeuda a cada chofer alrededor de 240 mil pesos. Sin embargo, según la UTA no recibieron hasta el momento ninguna confirmación de que este será efectivamente el esquema de pago.
La deuda y los desequilibrios nacionales
Se calcula que, en promedio, cada chofer debería cobrar alrededor de 240.000 pesos por atrasos generados en distintos conceptos, luego de que el Ministerio de Transporte de la Nación resolviera emitir una resolución fijando los aumentos de sueldos, sin que la UTA nacional y las cámaras empresariales firmaran el acuerdo paritario.
El viernes de la semana pasada, el paro total de actividades incluyó a los choferes del Area Metropolitana de Buenos Aires (Amba), ya que las empresas que operan en ese distrito se negaban a pagar los aumentos. Cabe recordar que, por cada colectivo que circula en el Amba, el Gobierno de la Nación aporta entre cuatro y cinco veces más subsidios que lo que destina a cada coche que opera en el resto del país.
Entre el 80 y 90% de los subsidios nacionales al transporte por colectivos se destinan a Capital Federal y Gran Buenos Aires. Frente al paro, el ministro de Economía y precandidato a la Presidencia de la Nación, Sergio Massa, intervino y la huelga se levantó en el Amba poco después de las 17.30 de ese día. Sin embargo, en otros puntos del interior la situación fue otra: en la provincia de Santa Fe y en esta ciudad capital, por ejemplo, la huelga se prolongó hasta después del mediodía del sábado.
“En el Amba, la Nación aportará más dinero para que las empresas paguen estos retroactivos. Nosotros, en cambio, seguimos recibiendo para todo el interior los mismos 7.000 millones mensuales desde enero, y el refuerzo anunciado de 2.000 millones será desde julio y a cobrar en agosto o septiembre”, afirmó el martes un empresario que opera en la provincia de Santa Fe.
Fuente: Aire de Santa Fe