Hasta que no se defina la vuelta del fútbol, da la sensación que Unión no avanzará en la contratación del nuevo técnico. Más que nada, porque se ahorra un salario importante en tiempos donde la cuarentena por la pandemia del coronavirus agudizó la crisis económica en los clubes. Entonces, se ahorró unos buenos mangos para intentar paliar una situación compleja y apremiante. En realidad, todo dependerá de la determinación final que tome AFA respecto a los descensos. Si bien es cierto que decidió quitarlos por dos temporadas, los jugadores amenazan con hacer un paro si se mantiene. Una presión que será casi imposible de sostener y, casi seguridad, se analizará nuevamente la cuestión.

Más que nada, porque sin equipos que pierdan la categoría los equipos podrían no hacer contrataciones y apostar por las inferiores, reduciendo notoriamente el presupuesto. Los jugadores entienden que eso atenta con posibilidades laborales y se plantaron para que no sea así. Esto amplía el escenario también a los entrenadores. Es por ello que todavía sigue latente la chance para Marcelo Mosset, estratega de la reserva rojiblanca. Así y todo, el presidente Luis Spahn insiste en traer a una persona con trayectoria y espalda. Algo complejo de encontrar, ya que Leonardo Madelón tenía un sustento sin comparación en Santa Fe.

A decir verdad, por el único que hubo sondeos fue por Sergio Rondina, de grata temporada en Arsenal. Termina su contrato el 30 de junio y por eso su perfil sería del gusto de la dirigencia. Desde Sarandí mostraron su malestar por los sondeos y por eso pretenden retenerlo, no obstante, el equipo Diez en Deportes accedió a la información que pondría todavía más expectante a Unión. Al parecer, Arsenal tiene una importante deuda por el ascenso y además, atrasos con el sueldo por lo que debería hacer una fuerte eorgación para por lo menos tentarlo a seguir. Una situación que jugaría en favor de Unión que, desde ya, no quiere pagar resarcimientos ni rescisiones. Todo puede cambiar en el ambiente del fútbol y por eso en Unión no quieren apurarse, pero a medida que pasa el tiempo, algunas cositas empiezan a allanar los caminos.