El drama desatado por el incendio de la vivienda de la familia Carnero Santo Tomé sigue sin respuestas, a casi un mes de la trágica fecha. Para la Justicia, no hay responsables por el siniestro que se cobró la vida de dos niños y un joven en Santo Tomé y tiene a una adolescente al borde de la muerte. A pesar de las innumerables declaraciones y denuncias de los vecinos, que afirman que los hermanitos Carnero vivían en un infierno de violencia propiciado por su madre y otros familiares; a pesar de un audio de Whatsapp en el que queda claro que el fuego fue provocado; a pesar de las amenazas inmediatamente previas de la madre de los chicos (“hoy vamos a ser noticia porque van a terminar todos en el cementerio”); a pesar de que mientras los chicos morían uno de los tíos miraba desde la vereda, mientras tomaba cerveza e insultaba  los bomberos, la fiscal del caso sigue sosteniendo que el incendio fue “accidental” y no ordenó ninguna detención.

Nicolás, de 7 años, falleció en el lugar. Jesús, de 9, murió dos días después, en el Hospital de Niños Dr. Orlando Alassia. Mariano, de 20, perdió la batalla contra la muerte tras agonizar durante 7 días en el Hospital Dr. José María Cullen, donde los médicos, incluso, le habían amputado una pierna para tratar de salvar su vida. La única sobreviviente de la tragedia es Micaela, de 13 años, que debió ser trasladada al Hospital Garrahan, en un estado de salud desesperante causado por las graves quemaduras sufridas -tenía un 90% de su cuerpo afectado por el fuego-.

Amenazas y responsabilidades

Dora, una vecina de la familia, se presentó a declarar en Fiscalía tras haber recibido amenazas por haber revelado el infierno que vivían los Carnero. Además, reveló al móvil de Aire de Santa Fe que recibió un mensaje de audio a través de Whatsapp en el que Betiana, la hermana mayor de la familia (una joven discapacitada) afirmaba haber sido ella quien desató el incendio que le costaría la vida a sus hermanitos. Sin embargo, los vecinos coinciden en señalar que Betiana está siendo presionada para desviar las sospechas que se dirigen hacia su madre. De todos modos, más allá de quién haya iniciado el fuego, algo queda claro: cada vez es más fuerte la hipótesis de que el incendio fue provocado, dando por tierra la versión de “accidente” que hasta ahora sostiene la Fiscalía. Tanto el audio como las amenazas a Dora quedaron registradas en sede judicial.

Un entierro casi secreto y ausencia de explicaciones

La inhumación de los restos de Nicolás -el nene que murió en el lugar del incendio- y de Jesús -que falleció en el Hospital de Niños- estaba prevista para las 18:00 del jueves 27. El horario no era un capricho: se suponía que, a esa hora, sus compañeros y docentes iban a poder acompañarlos para el adiós final. Nada de eso fue posible: sin previo aviso, alguien decidió adelantar el entierro de los Carnero para las 14:00. Los niños fueron despedidos casi en total soledad: sólo estaban presentes sus familiares, a los que la comunidad responsabiliza por lo sucedido. Apenas tres mamás de los compañeritos de clase se enteraron de casualidad de lo que estaba sucediendo en el cementerio y alcanzaron a buscar a sus hijos y llevarlos al camposanto: “La madre de estos chicos, que para nosotros es la responsable de que estos nenes hoy estén en un cajón, sí pudo ir al cementerio. Pero las maestras y los compañeritos de la escuela, el único lugar donde los nenes eran feliz, hoy no pudieron estar. Se quedaron todos llorando en la escuela“, reclamó una de las mamás en diálogo con el móvil de Aire de Santa Fe.

 

Testimonios desgarradores: la madre anticipó lo que podía pasar

Los vecinos que se acercaron al cementerio sumaron más testimonios que ilustran el negro cuadro de violencia que sufrían a diario los hermanitos. La mamá del mejor amiguito de Nicolás contó que era habitual que los niños sean castigados con encierro y privación total de alimento. Además, precisó que el sábado previo al fatal desenlace, Nico había estado todo el día de visita en su casa: “Cuando la mamá llegó a buscarlo como a las 8 de la noche, estaba alterada. Dijo que venía de la Comisaría y que le habían avisado que el lunes le iban a sacar los chicos. Antes de irse, dijo: ‘esta noche vamos a ser noticia porque terminamos todos en el cementerio’“, relató Laura, recordando el momento en que vio a Nicolás Carnerocon vida por última vez.

Además, otro de los vecinos contó que uno de los tíos de los niños, mientras los bomberos trabajaban para apagar el incendio, fue a comprar una botella de cerveza y se sentó tranquilamente a mirar lo que pasaba, mientras gritaba “Che, ¿cuándo van a sacar los cuerpos?”, “Se me pasa el asado” y “llevense todo eso que está quemado”, entre otras frases que indignan. “Las mamás vamos a sacar adelante esta causa. Nos quieren callar de todas maneras, pero nosotras queremos que se sepa la verdad. No vamos a parar hasta que se descubra lo que pasó”, agregó la mamá de un amiguito de los niños fallecidos.

Fuente: Aire de Santa Fe.